Coloquio: Cultura y ciudadanía ¿Somos o solo eres?

Te invitamos a asisitir y a difundir el Coloquio: «Cultura y Ciudadanía, somos o solo eres» que estamos organizando como CulturizArte (+ info en www.plataforma-medial.blogspot.com), el que se llevará a cabo el próximo jueves 02 de septiembre, entre 18:00 y 20:00 hrs.

Contaremos con los siguientes expositores:

Sergio Rojas, Académico del Departamento de Teoría de Las Artes de la Universidad de Chile.

Leonardo Ordoñez, ex Jefe del Departamento de Creación Artística, Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.

Mauricio Redolés, músico y poeta nacional.

Fecha y horario: jueves 02 de septiembre de 2010, de 18:00 a 20:00 hrs.

Lugar: Auditórium Escuela de Gobierno y Gestión Pública de la Universidad de Chile, República

Nº 517, Barrio Universitario.

Destinatarios: abierto a todo tipo de público, especialmente estudiantes, artistas y gestor@s culturales.

+ info

La  iniciativa surge a partir del desarrollo de un “Taller de Institucionalidad y Gestión Cultural”, organizado por CulturizArte, el que tuvo una importante convocatoria entre estudiantes y profesionales vinculados al área. Junto a ello, constituye una pieza fundamental en la búsqueda de antecedentes con miras a conformar un grupo de investigación sobre políticas culturales.

Dicho lo anterior, esta actividad pretender ser un aporte en el debate respecto de la oportunidad que representa para el andar de nuestras democracias, cuestionar o evidenciar la relación existente entre cultura y ciudadanía, considerando el renovado interés por la primera y el amplio debate sobre la necesidad de reconceptualización de la segunda.

Para esto, primero necesitamos reconocer nociones más o menos compartidas de estos conceptos, para lo que proponemos las siguientes:

En el caso de la cultura, su origen remite a la capacidad del ser humano para comunicar emociones y valorizaciones que modifican su entorno, de ahí que todo lo que ha creado se denomine “cultura”.

Mientras la idea de ciudadanía surge en conjunto con el avance de la democracia en occidente, como la serie de reconocimientos (derechos y deberes) que les son atribuidos a los integrantes de una comunidad política, además de la capacidad para involucrarse en los asuntos públicos.

Por lo que puede ser ejercida como mera exigibilidad de derechos o bien como participación activa en el desarrollo de una sociedad.

A su vez, es  indispensable reconocer que estos conceptos no permanecen atados a momentos históricos,  sino  que  están en  constante actualización  de  acuerdo  a  la  emergencia  de  nuevas  interacciones y relaciones sociales, (entre sujetos y entre éstos y las instituciones existentes en la sociedad) que van  transformando  los usos, contenidos,  formas, o percepciones que se  tienen de  ellos y su materialización en la realidad.

En el caso de la cultura tenemos una clara especialización o reducción del campo de acción que se le atribuye, lo que por una parte responde a la necesidad de acotar algo que en principio  se  nos  presenta  tan  amplio  y  por  tanto  casi  inabarcable,  como  también  con  la  segmentación  o  sectorialización que  va  generando  la modernidad  (ya  sea  en  términos  de  disciplinas  científicas,  agencias gubernamentales o sectores productivos). Es así como hoy en día tendemos a asociar  a la cultura, con los siguientes aspectos:

El desarrollo de las artes, como búsqueda estética y/o simbólica o derechamente como   espectáculos e industrias culturales.

La  preocupación  por  lo  patrimonial  como  rescate  de  la  memoria  e  identidad  de  las comunidades.

El debate en torno a modos o estilos de vida y su coexistencia.

En  el  caso  de  la  ciudadanía,  una  serie  de  acontecimientos  han  venido  desdibujando  su noción tradicional, cimentada en la construcción del Estado-nación moderno, nos referimos, por ejemplo, a los procesos: de mundialización  y  globalización  económica,  que  dificultan  la  inclusión/exclusión  a una  comunidad  política  nacional,  por  la  migración  de  bienes,  imágenes,  discursos  y personas de  manera cada vez más inmediata; de  individualización  y  fragmentación  social,  el  cual,  entre  otras  cosas,  favorece  la capacidad  de  elección  individual  de  clientes  o  consumidores  por  sobre  elecciones colectivas de comunidades u organizaciones sociales; de reforma y modernización del Estado, que bajo los imperativos de eficiencia, calidad y democratización,  intenta fomentar una noción de cliente/ciudadano activo y participante de  las  prestaciones  públicas,  de  acuerdo  a  derechos  civiles,  económicos,  sociales  y culturales.

Al ser capaces de  reconocer nociones comunes sobre estos conceptos, estamos en condiciones de preguntarnos por  la  importancia o utilidad que representa debatir respecto de  la  relación entre  cultura  y ciudadanía,  para  lo  cual proponemos  las  siguientes  carencias o  problemáticas
actuales:

Desgate de la democracia: apatía hacia los canales formales de participación, crisis de representación y desconfianza en las Instituciones.

Déficit ético: aumento de la marginalidad (no-ciudadano), desigualdad y/o inequidad, además del deterioro medioambiental.

Fragmentación social: dificultad creciente para generar adhesión a una comunidad o colectividad local, regional o nacional.

Transformación de lo público: necesidad de debatir sobre la mejor manera para (re) distribuir los recursos simbólicos y materiales de una sociedad, además de su regulación.

¿Más o menos Estado?; ¿ampliación de lo público o responsabilidad social empresarial?

Nos parece que al hablar de la relación entre cultura y ciudadanía, por una parte, podemos dar cuenta de la dificultad de las sociedades contemporáneas para expresar demandas colectivas, más allá de las elecciones de representantes o la agregación de decisiones de consumo y por otra, reconocer al campo cultural como espacio fértil para asegurar el ejercicio ciudadano, ya sea, mediante la expresión simbólica de malestar como plantea Sergio Rojas; recuperando la capacidad para organizarnos; o mediante la generación de espacios para el reconocimiento identitario y el debate con perspectivas críticas respecto de la manera en que coexistimos.

III. Objetivos

Objetivo General

Profundizar sobre la relación existente entre cultura y ciudadanía, de tal manera de cuestionar o evidenciar la potencialidad del campo cultural para el desarrollo y la democratización del país, mediante la creación de un espacio de formación y conversación.

Objetivos Específicos

1.- Dar a conocer perspectivas académicas de la relación entre cultura y ciudadanía.

2.- Dar a conocer perspectivas de miembros de la Institucionalidad cultural sobre esta relación.

3.- Dar a conocer perspectivas de creadores artísticos y/o gestores culturales sobre esta relación.

4.- Contribuir en la formación y diálogo sobre la situación actual de la cultura y la ciudadanía.

IV. Contenidos del Coloquio.

-Expositor: Sergio Rojas, académico del Depto. De Teoría de Las Artes, U. de Chile.

Duración: 20 minutos

La relación cultura y ciudadanía vista desde la institucionalidad cultural

-Expositor: Leonardo Ordoñez, ex Jefe del Departamento de Creación Artística, Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.

Duración: 20 minutos

-La relación cultura y ciudadanía vista desde la creación artística y/o gestión cultural

Expositor: Mauricio Redolés, músico y poeta nacional.

Duración: 20 minutos

– Ronda de preguntas y comentarios

Moderador: por confirmar.

Duración: 45 minutos

Nota: El coloquio tendrá un coffee break luego de terminadas las presentaciones de los expositores, para pasar luego a una ronda de preguntas y/o aportes de los asistentes.

El Ciudadano