Entre rejas, recuerdos y afectos: «Tan lleno de mi Rauli»
Fue el primer viernes de julio cuando Mauricio Hernández Norambuena recibió la visita de Tita Friedmann. No fue una reunión rutinaria, ni otra 'visita especial', como las llama Gendarmería, de esas escasas que recibe Ramiro en la cárcel de Rancagua. Fue el encuentro de dos generaciones, de dos testigos y protagonistas de la historia reciente de Chile, donde el afecto, la complicidad y el recuerdo de Raúl Pellegrin estuvo siempre presente.