El doble discurso del gobierno ante la Sofofa y los trabajadores públicos

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A la salida de la cena de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) el pasado miércoles, Hernán Von Mühlenbrock, líder de la organización, dijo que el trato que le habían dado al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, le dolía en el corazón. Este trato, causante de los dolores viscerales molestosos que sufrió el dirigente, se dio en medio de la discusión de reajuste salarial del sector público. Valdés propuso un 3,2% de aumento, idea que además de ser rechazada, fue pifiada al unísono por los trabajadores que se encontraban en la tribuna.

Increíbles, por eso mismo, resultaron las declaraciones que la presidenta Bachelet hizo ese mismo día en su discurso en la conmemoración de los 133 años de la Sofofa. “A pesar del escenario global adverso, de la desaceleración del crecimiento y de incertidumbres totalmente comprensibles por la velocidad de los cambios propuestos, Chile no está en crisis económica”, dijo.

Esto encendió las alarmas de los dirigentes sociales, y algunos salieron a cuestionar los tipos de mensajes que se entregan a los distintos gremios. “Es la misma presidenta que instruye al ministro de Hacienda para que nos diga a nosotros, trabajadores del sistema público, a su personal, que no hay recursos, que estamos en una situación compleja, que estamos en crisis y por lo tanto se tienen que ajustar el cinturón”, dice Esteban Maturana, líder de la Confederación Nacional de Funcionarios de Salud Municipal.

Es que la parada optimista de la presidenta en la celebración de los 133 años de la Sofofa, hace ver con preocupación la forma en que está actuando su gobierno.

“La presidenta está gobernando para los empresarios porque a los trabajadores les está entregando un reajuste miserable. A los empresarios les da subsidios, les entrega toda la confianza de que la reforma tributaria se va a aligerar, que la reforma laboral no va a ser tan abrupta”, termina Maturana.