Para que nunca más en Chile, para que nunca más

Ayer se realizó una velatón en memoria de Daniel Zamudio, el joven asesinado por la homofobia

Ayer se cumplieron 3 años de la brutal golpiza que terminó la vida de Daniel Zamudio, un joven que murió a manos de la violencia y la ignorancia de un grupo de jóvenes que cobardamente lo masacraron por el hecho de ser gay. Un crimen de odio que sirvió para promulgar la ley antidiscriminación que lleva su nombre y un crimen que nos debe obligar a seguir luchando para que un crimen así no vuelva a ocurrir.

Por Jimena Colombo

03/03/2015

Publicado en

Chile / Justicia y DD.HH

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ivanEn marzo de 2012, un crimen violento remeció el país: el asesinato de un joven en el centro de Santiago a manos de un grupo de «neonazis» que lo golpearon brutalmente hasta dejarlo agónico, tan sólo por el hecho de ser gay. Por esos días, mientras Daniel Zamudio estuvo hospitalizado en la UCI de la Posta Central, a las afueras de este establecimiento se empezaron a prender velas y a instalar carteles en su honor. Con el correr de los días, Daniel recibía a cientos de chilenos, que con ánimos de sumar energías positivas para su recuperación y en la desesperada creencia popular sumaron velas y calor para que el joven resistiera o al menos se fuera de este mundo sintiendo que todo un país sentía su partida y repudiaba a sus asesinos. Los días cercanos a su muerte, la entrada de la Posta por la calle Curicó tenía cientos de velas prendidas, ardiendo en su nombre. Carteles de apoyo, de ánimo y denuncias y muchas parejas solidarizando con el dolor de su familia.

Por ello, ayer cuando se conmemoraron 3 años del crimen odioso contra Daniel Zamudio, golpiza que lo dejó en estado de coma por 25 días en la Posta Central y que finalmente le quitó la vida, se recordó su deceso con una velatón en el lugar del crimen. Un crimen de odio suscitado por la ignorancia y la violencia, un asesinato homofóbico que terminó con la vida de un joven de 24 años tan sólo por ser gay. Sus asesinos están en la cárcel y mientras Daniel estuvo agonizando, se promulgó una ley que lleva su apellido y castiga este tipo de crímenes. Ese es su legado la ley Zamudio.

En su memoria, ayer se realizó una velatón en el lugar donde Daniel fue brutalmente golpeado por cerca de 7 horas hasta quedar gravemente herido, el parque San Borja, ubicado en el centro de Santiago en las cercanias del metro Universidad Católica. En el lugar estuvieron presentes sus familiares, amigos y representantes de organizaciones sociales como el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Jacqueline Vera -la madre de Daniel- agradeció la ayuda honesta de esta organización y sobretodo de Rolando Jiménez, pues aseguró que él le presto apoyo y ayuda en los momentos más difíciles tras la muerte de su hijo; «Por ser quien ha estado con nosotros, con nuestra familia de comienzo a fin». Jacqueline dijo que “cada día recuerdo a mi hermoso hijo. Le deseo lo mejor donde esté y cada año lo recordaré con una vela encendida”. En tanto,  el padre, Iván Zamudio enfatizó en que crearon una fundación que lleva el nombre del joven,con el fin de enfrentar la discriminación.

Rolando Jiménez, hizo un llamado a “mantener vivo el recuerdo de Daniel, a quien debemos la aprobación de la Ley Antidiscriminatoria y la creación del Primer Memorial por la Diversidad, donde hoy descansan sus restos”. Jiménez, quien ha luchado no sólo por la diversidad sino que también lucho de cara a la dictadura, sostuvo que   “no debemos jamás perder la capacidad de asombro y de rechazo frente a los crímenes de odio. En este país la homofobia mata. Sólo desde diciembre a la fecha meses tres personas han perdido la vida; Dilan Vera, Josefa Salazar y Claudio Olivares, en medio de un profundo dolor de sus familiares que acusan asesinatos homofóbicos y claman por justicia”. Además, recalcó que  “el Movilh llamó a perfeccionar ya la ley Zamudio. Esta norma ha sido eficiente prevenir los abusos discriminatorios, no así para sancionarlos. Demandamos que la ley invierta la carga de la prueba, garantice la aplicación de la agravante; que sólo ha sido usado una vez; y que se cree una institucionalidad antidiscriminatoria que coordine y fiscalice todos los esfuerzos».  Jiménez puntualizó que “al respecto ya presentamos un pre-proyecto de ley al Gobierno. Esperamos tener alguna respuesta este mes y también en cita que sostendremos esta semana con la ministra secretaria general de la Presidencia, Ximena Rincón”.

El acto de ayer, la velatón en su nombre, debe ser un recordatorio de que debemos seguir luchando para que nunca más a un joven en Chile se le arrebate la vida, para que el respeto y el amor sean los valores que entreguemos a nuestros hijos por sobre la competencia, el odio y la violencia, para que nunca más en Chile.

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