Por violaciones a los derechos humanos en la última dictadura

Comienza un histórico juicio contra la empresa Ford en Argentina

Este martes comienza en Buenos Aires la etapa de declaraciones de un juicio especial

Por Absalón Opazo

19/03/2018

Publicado en

Argentina / Latinoamérica

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Este martes comienza en Buenos Aires la etapa de declaraciones de un juicio especial. Por primera vez serán juzgadas las graves violaciones a los derechos humanos cometidas en un predio de la automotriz estadounidense Ford durante la dictadura militar argentina de 1976-1983.

Con cuatro décadas de demora, ex delegados de la compañía podrán declarar ante la justicia sobre la responsabilidad de la dirigencia empresarial de Ford por los secuestros y torturas de varios de sus obreros en ese período. Más de la mitad de las víctimas murieron sin esa posibilidad y la mitad de los responsables, sin condena.

El juicio comenzó en diciembre, pero los obreros de la fábrica ubicada en General Pacheco, provincia de Buenos Aires, recién podrán declarar a partir de este martes. La planta empleaba a más de 7 mil personas en 1976, cuando fue montado un centro clandestino de detención en el  por un acuerdo de la dirigencia de la empresa y las fuerzas militares.

La primera denuncia sobre el caso fue presentada en 2002, pero recién en 2013 la justicia comenzó a actuar y en 2014 elevó la causa a juicio, tras el procesamiento de tres ex directivos de Ford. Otros cuatro años más debieron esperar las víctimas sobrevivientes para poder declarar en un juicio oral y público, este 20 de marzo.

Respecto al juicio, el diario argentino Página 12 escribió: «En la historia que cuenta los secuestros y las torturas sufridas por obreros de la fábrica Ford durante la última dictadura cívico militar, el tiempo no jugó a favor de ellos: en la espera para que el Estado revise esos hechos, que duró 40 años, la mitad de ellos murieron sin obtener Justicia y la mitad de los dirigentes de una de las multinacionales automotrices con más peso, entonces y hoy, en el país, sin condena. Sin embargo, los días venideros ilusionan a los sobrevivientes, que comenzarán a descontarle a la desesperanza cuando dos de ellos declaren por primera vez ante jueces, ante sus familiares, ante sus abogados y ante sus verdugos».

 

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