Gabriel Villalba: Un «voto oculto» será decisivo para elegir al nuevo Presidente de Bolivia

El próximo domingo 3 de mayo se celebrarán las elecciones generales en Bolivia, que serán organizadas por un Gobierno de facto que en los últimos dos meses se ha dedicado a erradicar cualquier fuerza política contraria a su filosofía neoliberal, teniendo a la cabeza de ese proceso ilegítimo a Jeanine Áñez.

La pregunta que muchos se hacen es si esos comicios tendrán ciento por ciento credibilidad o si la sombra del fraude los rodea y terminará desprestigiando los resultados.

Al respecto, Gabriel Villalba, abogado boliviano, experto en derecho internacional y especializado en geopolítica, abordó el tema recientemente en una entrevista concedida al programa El Porqué de las Noticias, de la cadena Hispan TV.

“Las elecciones se darán en condiciones adversas, ya que después de restablecer las relaciones diplomáticas con Estados Unidos (una decisión del Gobierno de facto), este país envió una comisión oficial de ‘apoyo’ al proceso electoral”, acotó.

Desde hace décadas, los procesos electorales en terceros países a los que Washington envía una comisión de apoyo terminan proclamando al candidato de Washington, con polémica incluida. Uno de los casos más recientes fue Honduras.

Adicionalmente, Villalba lamenta que la Organización de los Estados Americanos (OEA) también esté involucrada en el proceso, por ser esta institución la punta de lanza que propició el golpe de Estado con sus acusaciones sin pruebas y maliciosas.

Sin embargo, el joven activista del partido Movimiento Al Socialismo afirma que en Bolivia existe un voto oculto que, indudablemente, favorecerá al MAS en las elecciones y, por tanto, será decisivo en la elección del futuro presidente de Bolivia.

“Hay personas que no dicen abiertamente que votarán por el MAS, pero lo harán e influirán mucho (…) Personas que están recordando las épocas dictatoriales, cuando los tanques militares y soldados con armamento de guerra tomaban las ciudades”, aseveró Villalba.

Asimismo, defiende que el voto joven también es consciente de ello. “El 40 % de nuestro padrón electoral son jóvenes y por primera vez están viendo tropas militares en la ciudades, tanques en las calles, aviones de guerra sobrevolando”.

“Hoy la mayoría de votación no es campesina, se encuentra en las ciudades”, precisó Villalba.

El también responsable del Centro de Estudios Nuestro Americano Chávez Kirchner – Bolivia se refiere específicamente a la militarización de las ciudades que ha ordenado el régimen de facto, con el visto bueno del resto de los candidatos de derecha, y que ha propiciado una represión y persecución sin límites contra quienes osen criticarlos o adversarlos.

El binomio del MAS

Para Villalba, la selección de Luis Arce y David Choquehuanca como dupla para la presidencia y vicepresidencia –respectivamente- constituye una simbiosis perfecta de cara a la actual coyuntura que atraviesa el país suramericano.

“Arce representa enormemente la estructura, el andamiaje económico, la correcta redistribución de la riqueza. Mientras Choquehuanca es ejemplo de indigenismo, descolonización y diplomacia de los pueblos”, destacó.

Para el joven activista político, “este es el camino, la representatividad de lo urbano con lo rural”.

Aunque hay facciones que consideran una mejor opción invertir el binomio, el joven recuerda que el andamiaje de construcción mediática de las clases medias tiene un mayor peso electoral actualmente, y en esa línea se enmarca la candidatura del MAS.

“Arce no solo representa a la clase media tradicional, sino también a la emergente”, aquellas que tienen una mejor calidad de vida gracias a la gestión de Evo Morales.

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Total desunión

Hasta la fecha, nueve alianzas y partidos políticos anunciaron que participarán en las elecciones generales, específicamente cinco alianzas y cuatro partidos.

Entre las alianzas inscritas destacan Libre 21 (integrada por el Movimiento Nacionalista Revolucionario y el Movimiento por la Soberanía), que postula al expresidente Jorge Tuto Quiroga.

Igualmente, está la coalición Creemos (Partido Demócrata Cristiano, Unidad Cívica Solidaridad y Agrupación Ciudadana Camino Democrático para el Cambio) que postula al ultraderechista Luis Fernando Camacho.

Por su parte, la alianza Juntos (Movimiento Social Demócrata, Sol.bo, Unir y Todos) postula a Jeanine Áñez, la autoproclamada presidenta interina.

Luego, Comunidad Ciudadana alineó al Frente Revolucionario de Izquierda, la Agrupación Ciudadana Jesús Lara y Chuquisaca para Todos; para postular al expresidente Carlos Mesa.

La quinta alianza política la llamaron Pueblo Unido y forman parte: la diputada Norma Piérola y la agrupación orureña San Felipe de Austria, aunque aún no se conoce quién postulará.

En tanto, los partidos inscritos son: el Movimiento Al Socialismo (MAS) con Luis Arce Catacora; el Movimiento Tercer Sistema con Felix Patzi, Pan.Bol que nuevamente presentará a Ruth Nina y Unidad Nacional (UN) con -se estima que sea- Samuel Doria Medina.