Miles de ecuatorianos marcharon a favor de Correa

Miles de ciudadanos ecuatorianos marcharon este jueves en Quito en apoyo al expresidente Rafael Correa, quien denuncia persecución judicial al ser vinculado al caso del secuestro del exlegislador Fernando Balda, hecho ocurrido en 2012.

La masiva movilización se realizó desde la céntrica Plaza del Arbolito y pretendía llegar hasta la Plaza Grande -adyacente del Palacio de Carondelet, sede presidencial- pero la policía bloqueó el paso y lanzó gases lacrimógenos, refiere La República en su portal web.

La legisladora de la Asamblea Nacional por la bancada Revolución Ciudadana, Gabriela Rivadeneira, explicó a los medios que con esta protesta quieren no solo apoyar a Correa, sino también rechazar la traición del actual presidente Lenín Moreno al programa de Gobierno con el fue elegido en 2017, con el apoyo del exmandatario.

«Moreno dio las espaldas a un proceso que debe dar respuestas económicas, productivas y que ahora vemos absolutamente abandonado», dijo Rivadeneira, citada por La República.

«Todos somos Correa», «Yo no vote por esto» eran algunas de las consignas que gritaban los manifestantes, muchos con banderas de Ecuador, gorras del Che Guevara y letreros contra el neoliberalismo.

Dentro de la marcha destacaban además varios edificios miniatura de cartón que representaban a los ministerios de los que el actual Gobierno ecuatoriano de Moreno ha despedido a miles de personas dentro de un plan de reajuste presupuestario.

El proceso de judicalización contra Correa se concretó este martes 3 de julio, cuando el Fiscal General (encargado) de Ecuador, Edwin Paúl Pérez, solicitó prisión preventiva en su contra ante la Corte Nacional de Justicia (CNJ) y pidió notificar a Interpol, mediante difusión de alerta roja, su captura y extradición. En conciencia, la jueza Daniella Camacho dictó la orden de prisión preventiva contra el líder ecuatoriano.

Tras estos hechos, diferentes líderes sociales y presidentes del mundo le han manifestado a Correa su apoyo, como el jefe de Estado venezolano Nicolás Maduro y el mandatario boliviano Evo Morales. También les han expresado su solidaridad el expresidente de Brasil Luiz Ignacio Lula Da Silva -hoy detenido sin pruebas- y la expresidenta y senadora de Argentina, Cristina Fernández de Krichner, quien también ha sido blanco de persecución judicial.