El documental LGBTTTIQ+ que cambiará la perspectiva trans/queer

Las flores de la noche: el lado lumínico de la comunidad LGBTTTIQ+

Este 24 de junio se proyectó en la Cinemateca Luis Buñuel, el documental Las flores de la noche (2020); filme que sigue la vida de cuatro personas LGBTTTIQ+ :)

Por Alexia Stuebing

25/06/2021

0 0


Este jueves 24 de junio, se llevó a cabo la primera proyección parte del Festival de Colores por la diversidad sexual en la Cinemateca Luis Buñuel de Puebla, con el largometraje Las flores de la noche (2020), presentada por lxs directores Eduardo Esquivel y Omar Robles

Sobre la película

Las flores de la noche es un documental que sigue la vida de cuatro personas (Uriel Ramos, Violeta Nicole, Dulce Gardenia y Alexa Moreno) de la comunidad LGBTTTIQ+, en un poblado de Jalisco llamado Mezcala. La película es bastante optimista, el guion en general oscila entre el misticismo propio de un pueblito rural a orilla de una laguna y la irreverencia que rodea la belleza trans/queer. 

El docu tiene algo particular: su estética fotográfica te integra a la historia (como todo buen docu); y al mismo tiempo te muestra la realidad que viven, sin caras ni poses. Incluso las escenas más poéticas se filtran con naturalidad. 

Apenas hablaba con un maestro de fotografía que tuve en la uni y comentaba sobre cómo el blanco y negro suele hacer que todo sea poético de una manera más pronta. Con Las flores de la noche ese recurso sería innecesario; aun cuando lo que observas carece de un canon de belleza establecido: todo a color, tal y como es, es perfectoMajestic! 

El sonido es otro plus, en todo momento es claro, hace énfasis a lo que debe. Los propios directores mencionan que fue un reto constante, debido a las situaciones que se filmaron.

Disidencia sexual e identidad narrativa

Dejan de lado este formato NatGeo, en el que sólo observas y esperas a que las cosas pasen, y se lanzan en la trama de tal manera en que la cámara se integra (nos integra) como otro personaje más (como un amigo tímido y chismoso que siempre está en su onda). 

La historia en sí misma no llega a ser del todo narrativa, en el sentido convencional de inicio-desarrollo-fin; pero sí que muestra un panorama amplio de todo lo que realmente rodea al día a día de sus protagonistas, es más íntima, más real. 

Es curiosa la manera en que el catolicismo y el mexicanismo se cuelan como una especie de escenario social: es imposible ignorar las raíces y los contextos que rodean a lxs protagonistas. En un país como México, donde los crímenes de odio son una situación diaria y normalizada, resulta refrescante mirar otros aspectos de la comunidad LGBTTTIQ+: donde se bailan, se maquillan entre carcajadas, se pelean, se encontentan, se festejan, se lloran. 

Lalo & Omar: dos jaliscienses para seguir a futuro 

Al término de la proyección, Omar y Lalo nos platican que en algún punto la idea del docu era dar testimonio de los sueños y problemáticas de lxs personajes; me parece que logran eso y mucho más, sin que sea necesario que lo expresen directo a la cámara. Llegas a ver y conocer a estas personas preciosas en muchos más niveles, es mágico. 

Cuentan que su relación con ellxs hizo que la película tomase este giro tierno; y fue también un factor importante para determinar varios ejes de la trama. Llegaron a la conclusión de que no buscaban dar a conocer una historia de revictimización y dolor, sino de alegrías, de orgullo: una película que lxs hiciera sentirse orgullosas de quienes son. 

Hay varias escenas en la película que sostienen esta idea: ser feliz por ser cómo eres y no ser algo que los demás creen que puede hacerte feliz. Es un documental de identidad, valioso por su mensaje, por su foto, por sus protagonistas, por sus directores, por donde la mires. 

Al terminar la sesión de diálogo, Lalo y Omar dicen que su intención es buscar que la peli tenga otras salidas, que se comparta y mire. Son preciosxs. Esperemos tenerlos pronto de nuevo en El Ciudadano y les auguramos mucho más éxito. 

Foto: Eduardo Esquivel (izquierda) & Omar Robles (derecha)

[Termino esta nota y me imagino leyendo esto en un barcito con Violeta y Dulce riendo en una esquina, caguameando, bien risorias; Alexa dándome un golpecito en la espalda burlándose de mis palabras pomposas y a Uriel sentidito penoso, pero con sus hoyuelos delatando su picardía. La verdad es un plan que sí se me antoja (jeje).] 

Aquí puedes ver las redes sociales de La flores de la noche:

También puedes leer estos artículos:

Colores: 1er Festival LGBTTTIQ+ en Puebla, organiza Secretaría de Cultura

8 de cada 10 personas la comunidad LGBTTTIQ han sido discriminadas, Ayuntamiento de Puebla

«Ley Agnes» rinde sus primeros frutos, aún tiene cuentas pendientes

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones

Comparte ✌️

Comenta 💬