Estudio sugiere que personas con rasgos psicopáticos pueden ser amables y colaboradoras en el trabajo

Normalmente se cree que todas las personas con rasgos de psicopatía son crueles y frías.

american psycho

El actor Christian Bale como Patrick Bateman en la película «American psycho»

Un estudio sugiere que los psicópatas, en el espacio de trabajo, no son tan disruptivos como se cree. Investigadores de la Universidad de Bonn, en Alemania, encontraron que alguna gente con rasgos psicopáticos son vistos por sus colegas como personas colaboradoras y cooperadoras.

El pre requisito para esta conclusión es que la persona en cuestión tenga ciertas habilidades sociales, como la de hacer sentir bien a los demás acerca de sí mismos.

Los psicópatas son personas típicamente frías, deshonestas, impulsivas y carentes de sentimiento de culpa. Como esto es sabido por la mayoría de la gente, normalmente se supone que la gente con rasgos psicopáticos son elementos disruptivos en el trabajo.

Sin embargo, el equipo del Instituto de Psicología de la Universidad de Bonn determinó que éste no siempre es el caso. Nora Schütte y sus colegas Entrevistaron a 161 personas que notoriamente mostraban uno de dos rasgos de psicopatía; dominación con tendencias temerarias o impulsividad egocéntrica. El primer rasgo se refiere a la necesidad de salirse con la suya sin importar las consecuencias de las propias acciones (psicópatas primarios). El segundo describe falta de autocontrol e incapacidad de ponerse frenos a sí mismos (psicópatas secundarios). Ambos rasgos conllevan una falta de consideración por otros.

En entrevista con estos sujetos y sus compañeros de trabajo, los investigadores encontraron que los psicópatas primarios con dominación temeraria podrían describirse como buenos elementos en un equipo y personas agradables de tratar.

Schütte explica: «Esto fue cierto solamente cuando estos psicópatas primarios tenían marcadas habilidades sociales. Dentro de ellas, estaban las habilidades que normalmente son importantes en el trabajo; la de saber cómo hacer sentir bien a los demás«.

El estudio encontró que los psicópatas secundarios con impulsividad egocéntrica eran consistentemente destructivos, no muy colaboradores y de pobre desempeño.

«Estas [son las] personas que sí ejercen un típico efecto negativo en sus ambientes de trabajo», explica Schütte. El doctor en conducta, Gerhard Blickle, quien supervisa el trabajo doctoral, explica que la imagen popular de los psicópatas se suele confundir.

«Las personas con un alto nivel de dominación temeraria, incluso pueden llegar a ser héroes en la vida diaria, como salvavidas, paramédicos o bomberos», explica Blickle.

El estudio fue publicado en Journal of Management.

Por The Independent

Traducción, El Ciudadano

 

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