Está diseñada para celulares inteligentes

“OLIO”, la aplicación que soluciona el problema del desperdicio de alimentos

Conéctese con sus vecinos y tiendas locales para que el excedente de alimentos y otros artículos para el hogar puedan ser compartidos de forma gratuita, en lugar de ser desechados

Si eres de las personas que siente dolor cuando tira a la basura comida que no va a consumir, o de una familia que podría estar pasando por problemas económicos para comprar alimentos, las nuevas tecnologías avanzan con “OLIO”, una solución a estos problemas que, desde el mundo virtual, busca eliminar el desperdicio colaborando con nuestros similares.

Se trata de una aplicación tecnológica diseñada para celulares inteligentes que puede ser usada por cualquiera de nosotros, incluyendo espacios como cafeterías o restaurantes, para evitar el desperdicio diario de lo que no venden.

Las creadoras de este aplicación son Saasha Celestial y Tessa Cook, quienes pensaron en una forma de aprovechar toda la comida que se desperdicia y, al mismo tiempo, cuidar el planeta.

La aplicación se pude descargar totalmente gratis y al momento de escribir sta nota tiene más de 520.000 personas registradas en 32 países. Desde su creación, un total de 635.000 alimentos han sido regalados.

La aplicación está disponible para sistemas iOS y Android. Te ayudará a controlar el desperdicio de comida.

“Conéctese con sus vecinos y tiendas locales para que el excedente de alimentos y otros artículos para el hogar puedan ser compartidos, no desechados. Todo en OLIO está disponible de forma gratuita o para donación”, invitan sus creadoras.

Usar OLIO es sencillo, simplemente se toma una foto del producto, se carga en la aplicación con una breve descripción y detalles, para que pueda ser visualizada por algún interesado.

“Nosotros consideramos que nuestro gran rival es el cubo de la basura. Usar OLIO tiene que ser igual de fácil, pero significativamente más divertido”, dijo Celestial a el diario El País, de España.

Para ella, todas las personas pueden contribuir para que haya un cambio significativo en el mundo sobre el desperdicio de alimentos. “Según nuestras encuestas, una de cada tres personas siente dolor cuando tira a la basura algo que hasta hace poco se podía comer”, explica.

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