El Polo Norte está alcanzando las mayores temperaturas registradas en la historia

En este momento en el Ártico, se han registrado temperaturas que son 25°C por encima de lo normal y se han visto olas chocando en el extremo occidental de Alaska en una estación en que el agua debería estar congelada.

Se ha sabido que este invierno en Europa ha sido muy crudo, con temperaturas que siguen marcando récords. Pero al mismo tiempo, un derretido Ártico está alcanzando temperaturas opuestas.

En este momento, en el Ártico, se han registrado temperaturas que son 25°C por encima de lo normal. Como informa IFLScience, el lunes y martes de esta semana, una estación meteorológica en Cape Morris Jesup, en el extremo norte de Groenlandia, estuvo 24 horas con temperaturas por encima de cero, a pesar de que actualmente el Ártico está en la oscuridad perpetua del invierno. Por lo general las temperaturas son de alrededor de -30°C (30 grados celsius bajo cero).

Como resultado de este calentamiento, el mar de Bering está experimentando los niveles más bajos de hielo marino jamás registrados, desde que comenzaron los datos del satélite en 1979. Se han visto olas chocando en el extremo occidental de Alaska en una estación en que el agua debería estar congelada.

«Esto no tiene precedentes», dijo a Public Radio International el científico Brain Brettschneider, investigador del clima de la Universidad de Alaska Fairbanks, EEUU. «La cantidad de hielo es menor de lo que ha sido en cualquier fecha entre mediados de enero y principios de mayo durante la era de los satélites», señala.

Es, por decir lo menos, inquietante. Según el medio Mashable, la tasa de disminución del hielo marino observada ha sido la mayor de los últimos 1.500 años.

Cape Moris Jesup, que está a solo 640 kilómetros del Polo Norte, solo ha experimentado temperaturas por encima del punto de congelación en breves ocasiones, en febrero de 2011 y de 2017, pero este año ya ha sucedido cinco veces.

Mientras en Europa las temperaturas están cayendo a 35 grados promedio, como resultado de la «Bestia del Este», como se llama a los vientos escandinavos originados en un vórtice polar. En ocasiones como esta las temperaturas en Europa pueden ser más frías que en el Polo Norte.

Como señaló The Washington Post, el Polo Norte casi alcanzó su punto de fusión en diciembre de 2016 y se cree que a medida que el aire caliente llega de todas partes, estos eventos de calentamiento invernal podrían convertirse en un lugar común.

«El [termómetro] en el Polo Norte bien podría subir por encima del punto de congelación entre el jueves y el domingo», señalaron los investigadores, citados en IFLScience.

El calentamiento del Ártico nos afecta a todos. Significa que los niveles del mar aumentarán y nuestro clima cambiará drásticamente. Se ha observado muchas veces que los humanos somos el principal impulsor de este efecto del cambio climático. Estos grandes saltos de temperatura deberían provocarnos al menos un deseo de cambiar la situación.

El Ciudadano

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