Hace 11 meses estaba en un hospital; ahora ganó una medalla para su país

En un momento Mark McMorris pensó que nunca más volvería a deslizarse por la nieve en su snowboard. Este fin de semana se colgó una medalla olímpica en el cuello.

Todo esto en un periodo menor a 12 meses.

McMorris se convirtió en uno de los primeros medallistas de Canadá en los Juegos Olímpicos de PyeongChang 2018 tras conseguir el bronce en snowboard y su historia ha atraído la atención de los medios en todo el mundo.

El pasado mes de marzo el atleta nacido en Saskatchewan estaba con su hermano recorriendo las montañas de Whistler, en Columbia Británica. En un momento se salió del trayecto principal y terminó chocando con un árbol.

Tuvo que esperar 90 minutos para que llegara la ambulancia aérea mientras su hermano lo cuidaba. Durante esa larga espera pensó que iba a morir.

McMorris llegó al hospital con la mandíbula fracturada, un brazo roto, fractura en la pelvis, varias fracturas en las costillas, el pulmón izquierdo colapsado y una rotura en el bazo.

Pasó 11 días hospitalizado y por momentos pensó que nunca volvería a practicar el deporte que ya le había dado una medalla de bronce en Sochi 2014, y siete medallas de oro en los X Games.

El atleta de 24 años no bajó los brazos, volvió a trabajar luego de una larga rehabilitación y se esforzó para entrar en el equipo canadiense que viajó a PyeongChang.

El esfuerzo dio frutos y este fin de semana pasado logró subirse al podio una vez más.

“Estoy en el podio y probablemente no debería estar aquí. Estoy muy impresionado”, dijo a la agencia Canadian Press luego de su gran desempeño.

También lo motivó el apoyo que le dio todo el país. “Definitivamente Canadá me apoyó al 100% y es algo que sentí”, dijo a la cadena CTV. “Fue algo motivante y me dio la energía extra para dar lo mejor de mí