Elías Pereyra, el futbolista de San Lorenzo que le ganó una batalla a la leucemia

En 2012, cuando recién tenía 13 años, el pequeño Elías Pereyra nacido en Buenos Aires recibía una noticia cuyo alcance aún no era capaz de asimilar

Por Alex Ripne

14/12/2017

Publicado en

Deportes

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En 2012, cuando recién tenía 13 años, el pequeño Elías Pereyra nacido en Buenos Aires recibía una noticia cuyo alcance aún no era capaz de asimilar. Tras descartar lo que parecían unas paperas, supo que le habían detectado leucemia. Su primera pregunta cuando le daban una explicación conforme a su edad fue por el fútbol. «¿Podré seguir jugando?».

Esa esperanza, la de poder volver a jugar al fútbol, movió a Pereyra, que más de cinco años después, con 18, ha alcanzado, por este orden, dos metas vitales: superar la leucemia, primero, y firmar un contrato profesional con San Lorenzo de Almagro, el club con el que soñaba antes, durante y después de la enfermedad.

Lo que a Pereyra más le gustaba hacer tuvo que posponerse durante dos años. No podía correr, no debía agitarse. Pero el zurdo nunca bajó los brazos. «En el hospital me hice amigo de un chico y a veces pateábamos una pelota en el patio, despacio. Teníamos la misma edad y los dos estábamos pasando exactamente por lo mismo.», rememora. Por suerte, la enfermedad pudo ser controlada: la posibilidad de recuperarse siempre permaneció latente si cumplía al detalle con los requisitos médicos.

Pero ganó. Venció a la enfermedad, consiguió ser nominado a la selección sub 20 y como parte de ese equipo,

Ya como parte del seleccionado Sub 20, en la última fecha de eliminatorias sudamericanas, Pereyra entrenó como sparring junto al equipo de Jorge Sampaoli. Del otro lado, claro, apareció ese hombre al que cualquier futbolista desea tener cara a cara. «Me tocó estar con Messi y no lo podía creer, es mejor el mejor del mundo. Me daban ganas de abrazarlo porque lo admiro mucho. ¿Qué le hice? ¡Apenas sombra! Pero me saqué una foto», cuenta.

El joven se toma todo con calma. Piensa con detalles antes de cada respuesta. Luchador de mil batallas, es un agradecido de la vida. «Después de todo lo que pasé no puedo ponerme presión por un partido. Yo sólo trato de disfrutar del fútbol», resalta.

Para Pereyra llegó su primer contrato profesional y el tiempo será el encargado de darle sus primeros minutos oficiales. «Para el 2018 dejo todo en manos de Dios. Espero muchas cosas, sueño con debutar en la primera de San Lorenzo y alguna vez ganar algún torneo. Amo jugar a la pelota y espero que la vida me permita llegar lo más lejos que pueda en este deporte», dice. Y va un poco más allá. «Aunque mi gran sueño de acá y para siempre es ver a mi familia feliz. Después de ganarle a la leucemia, yo lo soy». Ya firmó su primer contrato profesional. De ahora en adelante, todo debe ser alegría y fútbol.

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