Falla Humana

Se supo la verdad: Falta de combustible provocó la tragedia de Chapecoense

Es un capítulo que aún duele y enluta a todo el fútbol mundial

Por Alex Ripne

27/04/2018

Publicado en

Deportes

0 0


Es un capítulo que aún duele y enluta a todo el fútbol mundial. Pero con los años, se han ido entregando luces respecto de las causas que precipitaron esta tragedia y hoy apareció un informa lapidario: las 71 víctimas del accidente que afectó a la delegación del Chapecoense en suelo colombiano se debió a la falta de combustible del avión de Lamia que los transportaba y que finalmente capotó, ya que no portaba con lo necesario para completar el vuelo.

Así lo reveló el jefe del grupo de investigación de accidentes de la Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil), coronel Miguel Camacho, que señaló que se constató que el avión no tenía la cantidad suficiente de combustible.

«La aeronave se abasteció con 1.636 kilos de combustible en Santa Cruz para completar 9.300 kilos. Esta cantidad era insuficiente para completar el vuelo entre Santa Cruz, Bolivia, y Rionegro, Colombia. La cantidad mínima del combustible debía ser 11.603», detalló Camacho.

Fueron 71 personas que fallecieron -entre tripulantes, jugadores y cuerpo técnico del equipo y periodistas que iban a cubrir la final de la Copa Sudamericana- en este accidente que se produjo el 28 de noviembre de 2016, cuando el avión transportaba a la delegación del Chapecoense hasta Medellín, donde debían jugar la final de ida de la Copa Sudamericana ante el Atlético Nacional.

El informe final, presentado un año y cinco meses después de la tragedia, señala además que la compañía Lamia planeó este vuelo sin escalas y no cumplió con los requisitos de cantidad mínima de combustible exigidos por las autoridades internacionales. Es decir, la aerolínea no completó «los requisitos de cantidad mínima de combustible para completar un vuelo internacional; no tuvo en cuenta el combustible requerido para ir al destino»; para «contingencia, que es un cinco por ciento en este caso»; para «ir al alterno, que en este caso era Bogotá, y un combustible mínimo para poder aterrizar», añadió portavoz colombiano.

La investigación involucró a autoridades e instituciones de Colombia, Brasil, Bolivia, Estados Unidos e Inglaterra y en su informe final se explica que la empresa y la tripulación no tomaron la decisión de aterrizar en otro aeropuerto pese a que eran conscientes de que no tenían la gasolina suficiente para completar el vuelo.

«El avión pudo haber despegado con el combustible totalmente limitado de manera que insistimos que era obligatoria una escala intermedia», agregó el personero que dio a conocer la investigación final, remarcando que el accidente se produjo por falla humana.

Otra de las conclusiones categóricas del informe es que la compañía Lamia tenía problemas de organización, una compleja situación económica y dificultades en su gestión de seguridad operacional. «No cumplía las políticas de combustible. Efectivamente tenía una política escrita, hacía eco la empresa en sus manuales de los estándares internacionales sobre combustible, pero no los cumplía», detalló Camacho.

Asimismo, el informe destaca que la compañía boliviana no cumplió con la supervisión requerida al vuelo y la llamada oportuna de prioridad y emergencia cuando se estaba agotando el combustible, lo que generó «una demora en la aproximación del avión a la pista de Rionegro», aeropuerto que sirve a Medellín y donde el avión siniestrado pudo intentar aterrizar anticipadamente

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones