Emprende Rafael Reynoso jornada de limpieza de la contaminación visual

Un fantasma recorre el estado de Puebla: el fantasma de la publicidad «pirata», cuyas banderas no son otras que los anuncios conocidos como «espectaculares», que proliferan en el paisaje citadino, lastimando la vista.

El fenómeno ocupó un lugar central en la conferencia matutina de Miguel Barbosa impartida la mañana del 18 de marzo. En ella estuvo presente el Director General de Contaminación Visual, Rafael Reynoso Mora, respondiendo las interrogantes del gobernador frente a las cámaras, tal como lo reportó La Jornada de Oriente.

Por estos motivos administrativos, y también por preservar la armonía visual de la ciudad y del estado, así como por cuidar la estabilidad de los pasos peatonales, se anunció el lanzamiento de una jornada de limpieza de la contaminación visual de las vialidades principales.

«Llegaron y… ¡PUM!»

«En Puebla, las cosas van a caminar bien», sentenció el gobernador sobre la regulación de la publicidad espectacular en la vía pública. «No nos vamos a coludir con ningún interés, con ningún empresario o con ningún grupo de empresarios. No nos vamos a coludir ni vamos a ser socios de ellos, como lo han sido los que nos precedieron (…) En la zona metropolitana, ¿cuántos espectaculares hay? Físicamente», preguntó el gobernador.

«Hicimos un barrido y detectamos la ubicación de las estructuras útiles, que son las que ellos están utilizando y son las que rentan. En la zona metropolitana hay 650 estructuras útiles», respondió Reynoso Mora.

«¿Estructuras útiles? Las que no se están cayendo, pues», consultó Barbosa.

«Así es, las que ellos están rentando y les están generando un ingreso».

«¿Cuántas tienen licencia de esas?».

«De esas, únicamente 177».

«¿177? Y están mal. Están canceladas, ya», consultó el gobernador.

«Es correcto».

«¿Y las otras?»

«Son fantasmas. No tienen ningún tipo de documentación», explicó el director de Contaminación Visual.

«O sea, llegaron y ¡PUM!».

«Así es».

«Pusieron su estructura y a hacer negocio. Treinta, cincuenta mil pesos mensuales», dijo Barbosa. «¿Cuántos espectaculares hay en todo el estado?

«De todo el estado son ochocientos trece», respondió Reynoso Mora.

«¿Dentro de esos ochocientos trece tu cuentas esos que son de puentes?

«Claro».

«Que son estructura urbana, de los pasos peatonales. Y que llegaron y pusieron sus estructuras y ¡a poner publicidad! ¡Mírenlos! Qué listos, ¿verdad? ¡Qué señores tan listos, tan honorables», amonestó el gobernador Barbosa.

¿Contaminación visual? ¿Eso existe?

El término ha cobrado relevancia en el ámbito de la arquitectura y la planificación urbana y territorial durante los últimos años. En palabras de la especialista Adriana Portella, colaboradora del Instituto de Investigación para el Desarrollo Social de las Naciones Unidas

«La contaminación visual es la degradación de la calidad visual de centros citadinos históricos provocada por letreros comerciales desplegados en fachadas de edificios y en espacios públicos».

Adriana Portella: Visual Pollution: Advertising, Signage and Commercial Quality.

La proliferación de este tipo de letreros incluyen fatiga visual, distracción y además una disminución en la diversidad de opinión, como es propio de la sobreexposición a una propaganda omnisciente.