Migrantes pasan por el INM Puebla y no se sabe más de ellos

La delegación Puebla del Instituto Nacional de Migración de (INM) desconoce el destino de la gran mayoría de las personas migrantes que detectó entre el 1 de enero y el 16 de junio del presente año. De los 1 mil 974 presentados sólo acreditó la deportación de cinco personas, es decir 0.2 por ciento del total.

En la respuesta a la solicitud de información 330020322000574, el INM reveló que la misma situación se ha repetido en el último lustro, periodo en el que se registraron 13 mil 836 detenciones de las cuales sólo 176, el 1.2 por ciento, tuvieron atención migratoria oficial.

La estadística documenta que en 2018, 1 mil 347 personas indocumentadas fueron arrestadas y 10, deportadas. En 2019 fueron capturados 3 mil 34 y sólo 74 migrantes fueron repatriados.

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En el año 2020 fueron detenidos 1 mil 200 migrantes y sólo de 59 se tiene registro de atención. En 2021, la cifra se disparó a 6 mil 281 casos pero sólo se conoce el destino de 28 migrantes (0.4 por ciento).

De acuerdo con el último informe de monitoreo de centros de detención migratoria del Consejo Ciudadano del INM, las irregularidades en la documentación, los procedimientos de detención y operativos son una constante en las delegaciones del instituto.

El Informe presentado en 2017 documenta que en el país se registraron numerosos episodios de violencia y uso excesivo de la fuerza por parte de agentes del INM y otros cuerpos de seguridad en operativos de control y detención.

Según el informe se identificaron casos de personas con oficio de salida para regularización, que fueron detenidas de nuevo porque los agentes ignoraron los documentos expedidos por el propio INM.

En el monitoreo se constató que los operativos del INM se realizaron en colaboración con otros cuerpos de seguridad de los estados y municipios bajo el argumento de intervenir por razones de seguridad. Los oficios hallados en los expedientes de estos operativos son genéricos, sin base legal detallada.

En cuanto a la base legal para la detención o aseguramiento de personas migrantes indocumentadas, se detectaron lagunas legales en el procedimiento y no fue posible hallar el rastro de un fundamento legal específico para la detención que se mencione en los expedientes, más allá de la referencia genérica a la Ley de Migración y su Reglamento.

El documento indica que “tampoco existe revisión alguna de estas actuaciones de parte de ninguna autoridad ajena a la migratoria entre el momento de la interceptación de la persona y su posterior puesta a disposición en un centro de detención. En los más de 100 expedientes revisados, el fundamento legal de la detención fue siempre el mismo, sin una referencia expresa a circunstancias concretas o criterios que llevaron a la verificación de una persona u otra”.

El informe destaca que fueron numerosos los testimonios de los funcionarios del INM de diferentes delegaciones que señalaron que las personas migrantes se entregaban por su propia voluntad, en contradicción con lo expresado por la mayoría de las personas migrantes aseguradas que fueron entrevistadas, quienes refirieron haber sido privadas de la libertad en contra de su voluntad.

También señala que durante la revisión de expedientes se encontró que las personas migrantes no fueron asistidas ni por la representación consular ni por alguna organización de defensa o comisiones de derechos humanos y que en el proceso acelerado contradice lo asentado en los expedientes en cuanto a que las personas detenidas renunciaron expresamente a derechos y garantías.

Se denuncia que los traslados, y en especial los efectuados para la deportación, no son acompañados de actores como ACNUR, CNDH o personal médico.

En la mayoría de los casos se registró uso de la fuerza para obligar a personas a aceptar el traslado para deportación.

“Los traslados de personas de un centro de detención a otro se efectúan con ausencia de un mecanismo de registro y documentación riguroso y eficiente. En los expedientes que se tuvieron a la vista, si bien es cierto que se encontraba la notificación del traslado, no aparecían los motivos o razones que justificaban tal traslado, además, no se encontraba, en éstos, la constancia de la hora y la fecha de la conducción”, refiere el documento.

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Ilustración: Iván Rojas

Foto: Archivo El Ciudadano México

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