Recibe reconocimiento Andrea Lezama, víctima de violencia vicaria

La activista afirmó que estas agresiones son un problema que siempre ha existido por hombres enfurecidos con el desarrollo de las mujeres


Andrea Lezama Bonilla recibió este sábado 10 de junio el reconocimiento «Doña Rosario Ibarra de Piedra» por la lucha mantuvo por más de seis años en contra de la violencia vicaria en el estado de Puebla y por ser la primera mujer en lograr la vinculación a proceso de su agresor por este delito.

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Durante su discurso tras recibir este premio, Andrea Lezama expuso que la violencia vicaria que vivió por parte del padre de su hijo inició cuando ella quiso continuar estudiando la Licenciatura en Comunicación, lo cual su expareja no pudo aceptarlo y a partir de esto buscó la forma de truncarle ese sueño.

Lezama señaló que la violencia vicaria en México comenzó a ser reconocida apenas hace dos años, sin embargo, afirma que este es un problema que siempre ha existido y son hombres enfurecidos con el desarrollo de mujeres los que generalmente cometen este tipo de agresión.

Expuso que en este tipo de casos, los hombres normalmente trabajan en todo un plan que inicia con amenazas de quitarle sus hijos a una madre y finaliza cuando aprovechan el momento más vulnerable de ella para finalmente llevarlo a cabo.

Andrea Lezama indicó que los problemas se hacen más graves cuando las mujeres deciden iniciar un proceso para recuperar a sus hijos, pues además del tiempo que este demora en completarse, tienen que enfrentarse a la falta de tacto de las autoridades, quienes no les dan seguimiento puntual a sus casos y las terminan revictimizando por la situación que viven.

De igual forma, dijo que las mujeres que viven violencia vicaria llegan a perder sus trabajos por darle seguimiento al proceso legal, por lo que terminan quedándose sin recursos para concluirlo, mientras que los hombres cuentan con una red de apoyo que incluye abogados y autoridades.

Afirmó que los padres no deciden llevarse a sus hijos para darles una mejor vida, ya que muchas veces ni siquiera son ellos los que los terminan cuidándolos, sino algún familiar cercano, lo cual refuerza la teoría de que la violencia vicaria inicia por coraje y enojo hacia las madres.

«Los agresores pueden seguir haciendo su vida completamente normal, porque la mamá o la tía le cuidan al niño. Ellos tienen incluso la solvencia económica para poder seguir pagando a estos profesionistas sin ética»

Andrea lezama

En ocasiones anteriores, Andrea Lezama se ha expresado a favor de que se realicen reformas a la Ley Vicaria de Puebla para que funcionarios que sean negligentes y retrasen los procesos sean sancionados de forma automática.

De acuerdo con datos del Sistema Municipal DIF, en la ciudad de Puebla hay diez casos de violencia vicaria que se atienden desde esa dependencia, en los cuales las mujeres que son víctimas no se atreven a denunciar por miedo a que no vuelvan a ver a sus hijos.

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Foto: Agencia Enfoque

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