Problema del clima había sido considerado como riesgo por Obama, en 2016

Nueva «Estrategia de Defensa Nacional» del Pentágono descarta el cambio climático como amenaza

Documento señala que Estados Unidos debe recuperar su supremacía militar sobre Rusia y China, priorizar su preparación para la guerra y compartir la mantención de la seguridad mundial con sus aliados.

El cambio climático y el impacto que genera en la seguridad nacional e internacional no está incluido en la estrategia de defensa estadounidense, informó este viernes el jefe del Pentágono, Jim Mattis.

El problema del clima había sido incluido como una amenaza a la seguridad nacional por el ex mandatario Barack Obama, en 2016. Además, distintos científicos han indicado que los desastres naturales y hambrunas podrán incrementar el número de refugiados, lo que afectaría directamente la estabilidad global.

«Los efectos de un clima cambiante -tales como el aumento del acceso marítimo al Ártico, el crecimiento de los niveles del mar, entre otros- impactan nuestra situación de seguridad», expresó Mattis en 2017, al asumir su cargo.

Pero, el adjunto a Mattis, Patrick Shanahan, precisó el pasado mes ante los medios que esta exclusión de la estrategia de defensa estadounidense no significa que deje de ser una amenaza, sino que sólo varía su prioridad.

En ese sentido, el Informe de Riesgos Globales 2018 del Foro Económico Mundial (WEF, por su sigla en inglés) detalló que las amenazas ambientales por condiciones climáticas extremas será uno de los más grandes peligros de mayor impacto este año.

Recordemos que en junio pasado, el presidente Donald Trump anunció que su país no participaría en el Acuerdo de París sobre el cambio climático, el cual -aseguró- «era un fraude».

 

 

Supremacía militar sobre China y Rusia

Según consigna la agencia AFP, la nueva «Estrategia de Defensa Nacional» del Pentágono, publicada este viernes, señala que Estados Unidos debe recuperar su supremacía militar sobre Rusia y China, priorizar su preparación para la guerra y compartir la mantención de la seguridad mundial con sus aliados.

Al respecto, el gobierno de Donald Trump ve con preocupación que las fuerzas armadas estadounidenses estén sintiendo los efectos de años de «escasez de presupuesto y atrofia», y considera que es necesario devolverlas a su estado ideal de fortaleza. Así, la estrategia de defensa nacional del Pentágono apunta a incrementar el número de efectivos del ejército, mejorar su preparación y trabajar con aliados, todo mientras opera en varios frentes en Europa, Medio Oriente y Asia.

«Esta estrategia marca mi intención de buscar un cambio urgente a una escala significativa», señaló Mattis, agregando que «debemos utilizar enfoques creativos, realizar inversiones sostenidas y ser disciplinados en la ejecución para lograr ajustar las Fuerzas Conjuntas a nuestro tiempo, para que compitan, disuadan y ganen en este entorno de seguridad cada vez más complejo».

La nueva estrategia de defensa sigue, en este punto, los lineamientos de la estrategia de seguridad nacional de Trump, lanzada el mes pasado, donde también destaca el papel de China y Rusia en el ámbito de la seguridad global.

«China es un competidor estratégico que usa una economía depredadora para intimidar a sus vecinos mientras militariza el Mar del Sur de China», escribió Mattis, «y Rusia ha violado las fronteras de las naciones cercanas y busca aplica el poder de veto sobre las decisiones económicas, diplomáticas y de seguridad de sus vecinos», agregó.

De acuerdo al reporte de AFP, los dos países aludidos reaccionaron «con furia» a la estrategia de seguridad de Trump. Mientras Pekín acusó a Washington de tener una «mentalidad de Guerra Fría», Moscú denunció su «carácter imperialista».

Además, esta estrategia de seguridad de Trump contrasta con el carácter amistoso de su primera visita de Estado a Pekín en noviembre, cuando fue recibido con una generosa bienvenida y elogió repetidamente al presidente Xi Jinping.

 

La estrategia de Mattis también requiere una mayor coordinación con los aliados, a quienes Trump en la campaña criticó por no hacer lo suficiente para defender el orden global surgido tras la Segunda Guerra Mundial.

«Esperamos que los aliados europeos cumplan sus compromisos de aumentar los gastos de defensa y modernización para reforzar la alianza frente a nuestras preocupaciones de seguridad compartidas», concluyó Mattis.

AFP / Agencias

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones

Comparte ✌️

Comenta 💬