Benjamin Lloyd, el tatuador de niños que hace más feliz al mundo

Durante 10 años, Benjamin se ha dedicado a pintar con aerografía, y para experimentar nuevas experiencias, comenzó a tatuar gente adulta desde hace unos meses

Por B GS

01/06/2016

Publicado en

Tendencias

0 0


Durante 10 años, Benjamin se ha dedicado a pintar con aerografía, y para experimentar nuevas experiencias, comenzó a tatuar gente adulta desde hace unos meses. Un día, el hijo de uno de sus amigos asistió a una sesión de tatuaje.

a

El pequeño padecía una enfermedad crónica que empeoraba cada día y comentó que quería tatuarse como su papá. Los adultos, sorprendidos por la petición del niño, dudaron acerca de si debería o no realizarlo. Era obvio que la decisión de tener una marca durante toda la vida no se puede tomar cuando se tienen unos cuantos años de vida.

s

Benjamin entendió las dificultades de vivir con una enfermedad que entristece la existencia, y para darle un poco de luz a la vida del niño, le hizo un tatuaje temporal. Por supuesto, el pequeño quedó totalmente contento y agradeció la oportunidad de saber lo que se siente tener un tatuaje en el cuerpo. Lloyd, convencido de que este fue un acto bueno y alentador, subió las fotos de su reciente trabajo a su perfil de Facebook para conocer la reacción del público.

d

Dijo que si conseguía al menos 50 likes, iría al Auckland’s Starship Children’s Hospital a tatuar a los niños enfermos. Este tatuador no consiguió 50, sino más de 450 mil likes. Desde ese entonces ha tatuado a varios niños que quieren sentir la emoción de la tinta sobre la piel, por supuesto, tendrán que bañarse después para remover las ilustraciones de sus cuerpos. Con este acto ha logrado sacar la sonrisa de muchos pequeños que dicen que se tatuarán de verdad cuando crezcan.

f

El espíritu rebelde de estos pequeños sale a flote y, para complementar su experiencia, visten con cadenas, atuendos rudos y toman la pose de un valiente motociclista o un amante de la música rock.

Más allá de la angelical sonrisa de los niños, el acto de Benjamin Lloyd es una muestra de empatía con las personas que viven una vida complicada, y aunque pareciera que tatuar a un niño es una acción malvada y vil, su trabajo consiste en brindar un poco de luz en un mundo lleno de angustias y tristezas a causa de una enfermedad.

q

Con esto se demuestra que hay tatuajes para todo tipo de personas, incluso para las más espirituales. –

Fuente: CulturaColectiva 

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones