Costa Rica cerrará zoológicos estatales y los convertirá en jardines botánicos de clase mundial

El gobierno de Costa Rica avanza en el proceso de cerrar los zoológicos estatales Simón Bolívar y Santa Ana, puesto que notificaron a Fundazoo (administradora de estos recintos) su voluntad de cerrarlos definitivamente.

Así, el gobierno busca que las instalaciones sean destinadas como jardines botánicos de clase mundial con la idea de conservar ecosistemas urbanos que se encuentran en riesgo y así potenciar el turismo. Asimismo los animales que habitan en los zoológicos mencionados serán enviados a centros de vida silvestre o, en algunos casos, a su hábitat natural cuando cese el contrato de la fundación en 2024.

De acuerdo a las autoridades del ministerio de Ambiente y Energía, la iniciativa también persigue que las zonas urbanas tengan espacios verdes y sanos para propiciar la recreación de las personas.

Condiciones paupérrimas

Uno de los mayores problemas del zoológico Simón Bolívar se centra en que no ha renovado su infraestructura a pesar de que es centenario. Sus dependencias tienen condiciones paupérrimas para acoger a los animales. Las jaulas no poseen las condiciones mínimas. Los espacios son ínfimos. Sólo se salvan las jaulas de los monos.

Desde el diario La República de Costa Rica reflexionan: “Podemos convertir el Parque Bolívar en uno de los mejores jardines botánicos del mundo. Ofrezcamos una cafetería con el rico café costarricense y una vista del río Torres, añadamos los servicios educativos y otros, y el parque ayudaría a San José a atraer $100 millones al año en nuevos ingresos turísticos (…) Como un destino de clase mundial, el Parque Bolívar sería el ancla de un distrito, que cada año cuenta con más restaurantes, tiendas, oficinas y otras actividades urbanas; el Teatro Nacional, la Antigua Aduana, la histórica Estación de Ferrocarril del Atlántico, y la Universidad de Costa Rica, son otros activos importantes ubicados cerca del Bolívar”.

Un nuevo paradigma

El zoólogo Peter Höffken de la organización animalista PETA sostiene que el camino que sigue el gobierno costarricense es el apropiado. Indica que PETA espera que las autoridades gubernamentales hayan tomado la decisión con las previsiones adecuadas y que investigue a fondo cuáles son las especies que son susceptibles de ser entrenadas para que vuelvan a su ambiente natural y también que analice las que debieran ser destinadas a refugios naturales.

Este país ha puesto énfasis en la conservación del medio natural y de la fauna que lo habita. Al cerrar estos recintos Costa Rica abrirá un nuevo paradigma en torno a la protección de los ecosistemas, cuya iniciativa debieran seguir todas las naciones del planeta.