El barco «Madeleine» de la Flotilla de la Libertad (FFC, por sus siglas en inglés) zarpó el domingo del puerto italiano de Catania, en el sur de Italia, hacia la Franja de Gaza, con figuras a bordo como la activista climática sueca, Greta Thunberg, el actor irlandés Liam Cunningham y la eurodiputada franco-palestina Rima Hassan, como parte de una nueva misión humanitaria para romper el bloqueo impuesto por Israel a más de 2,4 millones de palestinos que viven en el enclave.
La FFC, fundada en 2010, es un movimiento internacional no violento que apoya a los palestinos y combina la ayuda humanitaria con la protesta política contra el bloqueo de Gaza.
Desde la agrupación, señalaron que la embarcación transporta «cantidades limitadas pero simbólicas» de ayuda humanitaria y que con esta acción buscan aumentar la “conciencia internacional” sobre la actual crisis humanitaria que se vive en Gaza.
“El barco Madeleine se dirige a Gaza con leche en polvo, suministros médicos y otros suministros vitales. Su objetivo es llegar a aguas territoriales palestinas a través de aguas territoriales europeas, que son aguas plenamente internacionales”, declararon.
El barco fue bautizado «Madeleine» en 2014 en honor a la única pescadora de Gaza en aquel entonces y emprendió su viaje luego de que otra embarcación del grupo, conocida como “Conscience”, fuera alcanzada por dos drones a principios de mayo, justo en las afueras de aguas territoriales maltesas.
El grupo culpó a Israel por el ataque, que dañó la sección delantera del barco, en uno de los más recientes enfrentamiento relacionados con los esfuerzos de enviar ayuda al territorio palestino devastado por casi 19 meses de guerra y constantes ataques perpetrados por el ejército del régimen sionista.
Desde la organización destacaron que este viaje desarmado y no violento se ajusta plenamente al derecho internacional y cualquier ataque o injerencia constituye un acto deliberado e ilegal contra la población civil.
A través de un comunicado, dejaron en claro que «no es un mero acto caritativo, sino una acción directa y pacífica para desafiar el bloqueo ilegal israelí y la escalada de crímenes de guerra».

Greta Thunberg acusa «silencio del mundo entero ante el genocidio transmitido en directo»
“Estamos haciendo esto porque, sin importar las probabilidades que tengamos, tenemos que seguir intentándolo” afirmó Greta Thunberg a los periodistas en un punto de prensa realizado antes de la partida del barco.
«En el momento en que dejamos de intentarlo, perdemos nuestra humanidad. Y por muy peligrosa que sea esta misión, no es ni de lejos tan peligrosa como el silencio del mundo entero ante el genocidio transmitido en directo», indicó, rompiendo a llorar durante su discurso.
Ante la creciente presión internacional, el gobierno del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu flexibilizó el bloqueo a Gaza el pasado 19 de mayo, lo que permitió la reanudación de operaciones extremadamente limitadas lideradas por la ONU
Sin embargo, las agencias de las Naciones Unidas y los principales grupos de ayuda han denunciado que las restricciones israelíes, el deterioro del estado de derecho y los saqueos generalizados hacen que sea extremadamente difícil entregar ayuda a los más de 2 millones de palestinos de Gaza.
De hecho desde la ONU alertaron el pasado viernes que la situación en Gaza se encuentra en su peor momento desde que Israel arreció su agresión en octubre de 2023.
«La situación catastrófica en Gaza es la peor desde que comenzó la guerra», alertó el portavoz de Naciones Unidas, Stephane Dujarric.
«La limitada cantidad de ayuda que entra en la Franja es insuficiente para atender a los más de 2 millones de personas que la necesitan desesperadamente», añadió.