Un trabajador agrícola murió tras caer del techo de un invernadero en una plantación de cannabis en Camarillo, California, durante una nueva redada migratoria ordenada por la administración de Donald Trump, y que esta vez contó con la presencia de decenas de manifestantes que se enfrentaron con los efectivos del ICE, sigla en inglés del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EEUU.
«El Sindicato de Trabajadores Agrícolas (UFW) confirmó este viernes que uno de los empleados de la granja Glass House Farms, que opera uno de los más grandes cultivos de cannabis con licencia en el sur de California, falleció tras resultar gravemente herido en el operativo este jueves», señaló un reporte enviado por la agencia EFE.
Preliminarmente, el trabajador ha sido identificado como Jesse García.
Por su parte, el comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU, Rodney Scott, dio a conocer que al menos diez adolescentes, uno de ellos de 14 años, fueron arrestados en el operativo, y a ocho de ellos se les catalogó como «no acompañados», es decir, entraron solos al país.
«Los trabajadores agrícolas están excluidos de las leyes básicas sobre trabajo infantil y, lamentablemente, no es raro que los adolescentes trabajen en los campos. Para ser claros: detener y deportar a niños no es una solución para el trabajo infantil», explicaron desde la UFW en un comunicado.
Trabajadores desaparecidos
El Sindicato de Trabajadores Agrícolas (UFW) denunció además que hay un número sin precisar de trabajadores desaparecidos, y que el operativo incluyó también las granjas de tomate y pepino que están en Camarillo.
Asimismo, algunos de los manifestantes detenidos -de nacionalidad estadounidense- acusaron retenciones hasta por 8 horas por parte de los agentes migratorios y de la Guardia Nacional, y que se les liberó solo después de obligarles a borrar fotos y videos de la redada de sus teléfonos.
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El Ciudadano