Una baja en el consumo de marihuana y alcohol, pero un preocupante incremento en el uso de tranquilizantes sin receta médica, fueron algunos de los resultados que entregó el Tercer Estudio de Consumo de Drogas en Educación Superior realizado por Senda (Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol).
Realizado entre el 15 de mayo y el 27 de julio de 2025, la investigación se aplicó a 28.362 estudiantes de 66 instituciones de educación superior en las 16 regiones de Chile, mediante una encuesta online anónima gestionada por el Observatorio Chileno de Drogas de Senda.
En primer término, desde la entidad destacaron que la prevalencia de consumo de alcohol durante el último mes fue de 42,3%, sin embargo, el 60,9% de quienes bebieron en ese período declara haberse embriagado al menos una vez, lo que refleja patrones de consumo intenso y potencialmente riesgosos.
«En el caso de la marihuana, el 23,0% de los estudiantes declara haberla consumido durante el último año (31,6% en 2021), y el 14,0% durante el último mes. Dentro de este último grupo, 6,6% del total de estudiantes la utilizó diez o más días durante ese período, lo que también apunta a consumos más intensos», apuntaron desde el Servicio.
En esa línea, la directora nacional de Senda, Natalia Riffo, indicó que «menos estudiantes están consumiendo, pero quienes lo hacen tienden a hacerlo con mayor intensidad. Estos patrones no necesariamente implican un consumo problemático, pero sí son señales de riesgo que deben abordarse desde la prevención».
Medicamentos sin receta
El estudio también identificó el consumo de medicamentos sin receta médica en el último año, principalmente tranquilizantes (5,7%), analgésicos (3,3%) y estimulantes (1,7%).
En el caso de los tranquilizantes, el resultado es mayor al observado en 2021 (4,5%). Al respecto, Senda advirtió que este tipo de prácticas podría estar relacionado con mecanismos para enfrentar el estrés o las demandas académicas, por lo que planteó la importancia de integrar la salud mental en las estrategias preventivas.
En cuanto a las drogas sintéticas, el estudio muestra prevalencias en el último año que se ubican en torno al 2%, entre ellas, éxtasis o MDMA (1,7%), tusi o ketamina (2,2%) y otras drogas sintéticas (0,8%).
Distribución de la muestra
Respecto a la distribución de la muestra según sexo, se informó que un 60,5% se identificó como mujer, 37,2% como hombre y un 2,3% prefirió no responder.
En tanto, según edad, la edad, la muestra abarcó los segmentos de 17 y 20 años (36,8%); 21 y 22 años (19,9%); 23 y 24 años (11,8%); y 25 años o más (31,5%).
El Ciudadano
						
										
										
										
										
										
										
										
										
										