En enero de 2013, mientras asistía al festival defotografía Chobi Mela en Dhaka, Bangladesh, descubrí Robindra Shorbod, un pequeño parque en el suroeste de Dacca que es el hogar de unos niños de la calle. Niños de la calle que piden dinero, vagabundean, recogen envases de plástico para venderlos como reciclaje, duermen sobre cartones y comparten cada pedazo de alimento que ganan con los 10 perros que viven junto a ellos.»
«Durante el festival, pasé una semana junto a los niños y los perros, aprendiendo sobre sus rutinas y métodos de supervivencia diaria. Doblé la semana haciendo una serie de retratos. En cada uno de estos retratos, los muchachos exhiben su individualidad. Pero juntos se convierten en miembros de una familia. Una familia de dos especies, ambas barridas marginadas en una de las ciudades más grandes y pobladas del planeta.
Estos retratos muestran la fuerza, resistencia y, sobre todo, la camaradería entre estos niños huérfanos y los perros que han adoptado.
Los chicos no se les dijo que posasen, sencillamente entraron en el marco con su compañero favorito para que les fotografiase.»
via boredpanda