Anton Kraft es un culturista de 52 años que padece de enanismo, pero a pesar de su condición ha sabido romper los límites y se transformó en el único hombre del mundo en poder levantar cuatro veces su propio peso. Chiquito, pero poderoso.
En el amor todo era más o menos regular. Solía salir con chicas que eran sólo un poco más altas que él, pero de repente cupido flechó a alguien muy diferente a lo usual y dio con China Bell, una transexual de 43 años que mide 1.90 metros.
Kraft no puede estar más feliz con su vida y con su 1,20 de estatura, y si bien la mujer no estaba muy segura de salir con su actual pareja cuando éste se lo propuso, quedó rápidamente alucinada con sus grandes habilidades en el levantamiento de pesas.
“Creo que el levantamiento de pesas de Anton es muy sexy porque creo que él es sexy. Cuando tienes un título mundial de peso pesado, eso significa mucho”, comentó Bell.
Y no es para menos, si Kraft asegura que tiene el récord más alto de pesas en banco de todos los tiempos en su categoría de peso. Esto sin mencionar que afirma haber muerto cinco veces para después resucitar, pasando por el ahogo hasta haberse caído de una ventana.
“Nunca había salido con un chico que midiera 1,20 cm y sentía mucha curiosidad. Estoy orgullosa de haberle dado una oportunidad porque es una persona increíble”, continuó la mujer.
“Soy diferente y él es diferente, y de dónde venimos, ser diferente está bien”.
En cuando al hombre de relación, éste afirma que su máxima fuerza la tiene gracias a su querida novia:
“Solíamos ir contra la corriente, pero la corriente ha cambiado”, dijo.
“Florida es uno de los estados que permite el matrimonio homosexual y nosotros somos básicamente del mismo sexo”.
“Me gusta salir con una mujer transexual porque nació un hombre y está haciendo lo máximo posible para ser lo más femenino que pueda”.
Su reina ya la tiene, y ya no puede más de la dicha que le deparó su vida gracias a la gran acompañante que hoy tiene.
“Ahora mismo me siento el hombre más afortunado del planeta. Estamos felices y nunca me he sentido mejor de como me siento ahora. Y es gracias a China”, finalizó.