La estrella británica de la WWE Paige dice que sufrió «anorexia inducida por el estrés» y consideró el suicidio luego de que se filtraran videos sexualmente explícitos de ella por internet.
Paige regresó a Raw el mes pasado como líder de una nueva facción llamada Absolution, después de más de 16 meses de problemas fuera del ring. Recibió dos suspensiones de la Política de bienestar, se sometió a una cirugía de cuello y se le robó y compartió contenido sexualmente explícito en Internet. La excampeona de Divas, cuyo verdadero nombre es Saraya-Jade Bevis, también apareció en un video sexual que aparentemente incluía a dos luchadores masculinos.
En el último episodio del podcast del ex locutor de WWE Lilian Garcia, Paige contó su horror por la invasión de su privacidad.
Ella dijo: «Eso me marcó, hasta el punto en que a veces no quiero salir. La gente me mira mal. Salí ayer con un amigo. Estábamos sentados allí con un Bloody Mary. Este tipo se acerca a mi amigo y le dice ‘esa es la estrella porno’.
Ella dijo que era «joven y tonta» y cometió errores, pero no quería ser conocida por lo que sucedió y ahora tiene que vivir con la «degradación».
Paige dijo: «Cuando salieron, me atrincheraron en la casa durante un par de meses. Estaba tan triste que pensé en suicidarme. Estaba en el piso, muy bajo. Me volví tan flaca que terminé colapsando por cansancio en el hospital de Inglaterra. Me dijeron que en ese momento era como una anorexia inducida por el estrés. No estaba comiendo, no estaba durmiendo, perdí todo el pelo. Tengo recortes en este momento pero literalmente no tengo pelo porque se me cayó el pelo, porque estaba muy estresada. Simplemente me rompió el corazón ‘¿por qué alguien querría hacerle eso a alguien?’.
Paige dijo que los hijos de su ex novio, Alberto Del Rio, fueron maltratados en la escuela, mientras que ella fue víctima de un «acoso cibernético» que la llevó a querer suicidarse. Paige agregó que se reunió con Vince y Stephanie McMahon a su regreso a la empresa y se le dijo que estaban felices de que ella estuviera en casa. La estrella recibió una suspensión de 30 días por violar la Política de Bienestar de la WWE en agosto de 2016 y una suspensión de 60 días por una segunda infracción dos meses después.
La luchadora es otra víctima del acoso por redes sociales, en que vidas son simplemente destruidas.
Fuente: Mirror
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