Senador Huenchumilla advierte que el verdadero problema de la DC no es una opción presidencial propia, sino subsistir como partido
El senador DC por la Araucanía, Francisco Huenchumilla, planteó que el principal desafío de la Democracia Cristiana (DC) no es definir una candidatura presidencial, sino asegurar su supervivencia como partido. En entrevista con Radio Diario UChile, el parlamentario subrayó que las elecciones de este año son cruciales para el futuro de la colectividad, cuyo «nudo crítico» es mantener una fuerza parlamentaria que le permita seguir existiendo.
Huenchumilla aclaró que, institucionalmente, la DC no ha discutido un «plan B» en caso de que Carolina Tohá no gane las primarias oficialistas. «Hay voces individuales opinando, pero eso es normal. La DC no es parte jurídica ni política de esta coalición (Unidad por Chile), aunque apoye a Tohá. El resultado no es vinculante, y es válido preguntarse qué hacer ahora», explicó.
El senador rechazó respuestas simplistas, como levantar una candidatura presidencial propia. «El problema de la DC hoy no es tener o no un candidato, sino subsistir como partido«, afirmó. Enfatizó que la prioridad es asegurar una lista parlamentaria competitiva que supere el 4% o 5% de los votos y evite perder escaños.
Para Huenchumilla, el riesgo es claro: «Si no actuamos, la DC podría seguir descomponiéndose en la parte baja de la tabla parlamentaria». Agregó que el debate debe centrarse en cómo mantener una fuerza legislativa que permita al partido superar sus crisis históricas, más allá de una figura presidencial.
El parlamentario advirtió que optar por un candidato sin una estrategia parlamentaria sólida sería un error. «Corres el riesgo de quedar solo: tener un nombre presidencial, pero una lista no competitiva», señaló. Subrayó la necesidad de diálogo y posibles coaliciones para evitar el aislamiento político.
Huenchumilla reiteró que la DC enfrenta una encrucijada compleja, advirtiendo que no es solo esperar y luego lanzar un candidato, ya que estaría en juego el futuro del partido y su representación en el Congreso. Llama a priorizar la construcción de alianzas que fortalezcan su presencia legislativa.
“El debate es mucho más complejo de decir, ‘Esperemos qué pasa y levantemos un candidato presidencial’. Esa es una mirada de un juicio simplista, porque el problema es mucho más complejo y donde está en juego qué va a pasar con la Democracia Cristiana como partido político y con la fuerza parlamentaria que pueda tener. Y eso requiere, naturalmente, una conversación, un diálogo y posibles coaliciones, porque si no, corres el riesgo de quedar solo y tener un candidato presidencial, pero tener una lista parlamentaria que a lo mejor no es competitiva“, consignó Huenchumilla a Radio Diario Uchile.