A pesar de ser primavera, la lluvia fue la antesala de un significativo encuentro con la memoria. El pasado sábado 5 de diciembre, más de 100 personas llegaron hasta el sitio de memoria Melinka-Puchuncaví, para ser parte de la presentación de “Cuervo”, una adaptación teatral y audiovisual de la autobiografía inédita del actor, dramaturgo, director y fundador de Teatro Aleph, Óscar Cuervo Castro, titulada por su autor como Teatrografía.
Protagonizada y narrada por tres de sus hijos, “Cuervo” revisa este texto escrito por Óscar Castro durante su exilio en Francia, evocando la represión vivida por él y su familia, y el rol que ocupó la creación escénica para sobrellevar la reclusión, además de su impacto en los presos y opresores; como es el caso del sitio donde se estrenó la obra, donde él estuvo recluido.
“Desde que nacimos, crecimos sobre las tablas del Teatro Aleph de Ivry (París), criados por los relatos de nuestro padre sobre Chile. Pero el tiempo que precedió a su exilio en Francia, siempre guardó un poco de misterio, sobre todo sus dos años en los campos de concentración. Él hablaba de eso, pero casi siempre a través de su mirada fantasiosa, para protegernos”, cuentan sus hijos Cosme y Óscar, quienes llevan a escena en esta obra narrada cinematográficamente el ya referido libro.
Sobre la presentación en sitios como Melinka Puchuncaví, el Parque Cultural de Valparaíso – Ex Cárcel y el Parque por la Paz Villa Grimaldi, los hermanos Castro destacan que parte de sus anhelos en torno a este montaje era que “esta gira fuera simbólica, al igual que la obra: deseábamos actuar en los propios lugares, en los antiguos campos de concentración y centros de tortura, que hoy se han convertido en sitios de memoria”.
Como cuenta el productor, Corentin Rostollan, todo se montó en muy poco tiempo: “Fui a verla la noche de su estreno en París, en junio de este año y al instante entendí lo fundamental que era para ellos volver al lugar de los hechos. No querían esperar: querían presentarla en la misma tierra donde había pasado todo, donde habían venido a filmar, y sobre todo — actuarla para quienes habían sido parte de esa historia”, dijo Rostollan.
Creación autogestionada
Como explican los creadores de “Cuervo”, esta obra ha sido autogestionada. Tras las grabaciones realizadas en Chile -que incluyeron a otros prisioneros y el registro en dichos recintos por donde pasó Óscar- “elaboramos el espectáculo en nuestro estudio de trabajo, una especie de búnker poético con aspecto de estacionamiento subterráneo. Durante un mes, nos sumergimos completamente allí, sin ver la luz del día, tejiendo los hilos de esta historia, dándole aliento, colores, respiración”.
“Fue un trabajo apasionante llevado a cabo entre dos hermanos en búsqueda de sus orígenes, acompañados de Jeanne Frenkel, la ilustradora y escenógrafa de este relato. Nos gusta reflexionar a partir de un dispositivo a la vez orgánico y tecnológico: mezclar secuencias documentales proyectadas desde una pantalla LED de un smartphone, papel recortado, gelatinas… El espectáculo refleja las creaciones que nuestro padre montaba en los campos: hecho con casi nada, pero con creatividad y poesía”, agregan Cosme y Óscar Castro.
Este aspecto, el del viaje y el reencuentro con la memoria, ha sido representado también por el lenguaje de la música. Como explica Lou Rotzinger, compositor de la obra, “necesitábamos una música que evocara el viaje (…) quería crear una versión de esta música más personal y íntima, y nos orientamos hacia sonoridades muy aireadas; tenía que haber espacio para el imaginario y para la narración”.
En tanto, desde el trabajo con las ilustraciones, Jeanne Frenkel destaca que el proceso de creación estuvo “guiado por la idea de dejar un amplio espacio a la imaginación. Para ello, fue necesario construir imágenes muy depuradas y simples, con el fin de no encerrar ni disminuir la fuerza de las palabras. Opté por una estética casi ‘naíf’, como un cuento para niños; las palabras de un padre dirigidas a sus hijos. Las siluetas de los personajes importantes están inspiradas en fotografías de los protagonistas, redibujadas y estilizadas”.

Con estas herramientas y la convicción de la importancia de este aporte a la memoria del país, destaca el productor, “desde que empezó la gira, las salas se han llenado, la respuesta del público ha sido impresionante. Llega gente muy diversa, de todas las edades — y siempre muy emocionada con la puesta”.
Así, esta gira teatral logró llevar la obra a tres regiones (Valparaíso, Maule, Metropolitana De Santiago) en tan solo 15 días, reuniendo, a la fecha, a más de mil espectadores. Mira el teaser de la obra aquí.
Próximas funciones
“Cuervo” regresa con sus presentaciones en enero de 2026. La primera cita es el sábado 3 de enero en el Teatro Biobío, en Concepción. Más información sobre esta función que se realizará a las 19 hrs. y sus entradas gratuitas, acá.
Luego, el cierre de la gira será en Santiago, específicamente en casa Teatro Aleph, ubicada en La Cisterna, el 5 de enero 2026, junto a un concierto excepcional del aclamado dúo musical chileno Dúo Pajarito, conformado por las artistas Amaia José y Fiona Murillo.
La obra se presentará en la Sala Julieta del Aleph Chile, teatro que lleva el nombre de la madre de Oscar Castro, detenida desaparecida. Más información en el sitio web de Teatro Aleph.
“Esperamos la puedan ver muchas personas, porque habla de esperanza, de lucha y de resistencia — pero con esperanza y con fuerza; cuando en este país pareciera ganar siempre el miedo, la obsesión con un enemigo y el llamado a matarlo, deportarlo, enjaularlo”, concluyó el productor Corentin Rostollan.

El Ciudadano

