¿Hacer la guerra o huir de ella?

Mujeres sirias que tomaron las armas

Un fotógrafo retrató a las mujeres que se alistan para combatir en el frente por el ejército Sirio. En el 2013 surgió el primer batallón compuesto íntegramente por mujeres. Esto se debe, en gran parte, a la merma de la población masculina (han muerto más de 210.000 personas y otras tantas emigraron). La militancia armada, no obstante, se hace de manera oficial (en el ejército) y no oficial (el células de resistencia).

Por Lucio V. Pinedo

02/02/2016

Publicado en

Artes / Cultura / Fotografía / Género / Mundo

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El conflicto Sirio va más allá de lo que los medios de comunicación han mostrado al mundo entero. El fotógrafo Sebastiano Tomada Piccolomini (Nueva York, 1986) retrata de manera precisa lo que pasa en ese lugar. En esta serie fotográfica muestra a las mujeres de la Free Syrian Army, con base en Aleppo, quienes están dispuestas a morir en el frente de guerra por su país y sus familias.

Sin importar la edad ni el estado civil, se siguen reclutando mujeres para ser guerrilleras. Lo que más llama la atención de esta serie son los comentarios que las reclutas hacen al respecto de esta situación cotidiana en Siria.

Vale muchísimo la pena conocer todo el trabajo fotográfico que ha realizado Sebastiano Tomada Piccolomini; por ya que por algo ha sido acreedor de galardones como el World Press Photo Award y el The 2013 Humanitarian International Red Cross.

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«Mi casa en Dar’a fue destruida por 2 bombas… me mudé a Aleppo con mi familia, decidí tomar un arma y luchar contra el régimen». Om Ahmad  (72 años, ama de casa con 3 hijos).

 

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«Yo lucho por la vida y la libertad. Lucho para demostrar que la mujer y el hombre son iguales». Benifet Ikhla (27 años, viuda con 6 hijos).

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«Me siento optimista, vamos a derrotar al régimen, poner fin a la pobreza y el maltrato». Khansa (42 años, casada, ama de casa con 7 hijos).

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«Mi marido murió en el frente, voy a morir ahí también, que Dios nos ayude». Fadwa (20 años, viuda y con tres hijos).

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«Occidente no ve ningún problema en Siria, mientras que nosotros pedimos su apoyo, nuestros hijos, amigos y familiares están siendo castigados, sin ninguna razón». Ali (16 años, estudiante).

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«Ser maltratado por un guardia de seguridad del régimen en frente de mi marido es la cosa más humillante que le ha pasado a mi familia: tomé un arma, me uní a la lucha». Om Faraj (30 años de edad, ama de casa sin hijos).

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«Soy sincera con Dios, que es todo lo que necesito y quiero, el resto vendrá con el tiempo». Amal (30 años, casada, ama de casa con 3 hijos).

 

Sebastiano Tomada Piccolomini (Manhattan, 1986), después de crecer en Florencia, Italia, regresó a Nueva York para asistir a la Universidad de Parsons y la New School, donde se graduó con una doble Licenciatura en Comunicación y en Fotografía, en 2010. Desde entonces, se especializa en el documental y el retrato. Fue durante su tiempo en la universidad que él comenzó a desarrollar un estilo personal, centrándose en gran medida en el documental y la fotografía de retrato.

Sus clientes incluyen a The Sunday Times, la revista Vanity Fair, The New Republic, Zeit, el Atlántico y Businessweek, GQ, Vogue.

Actualmente, sidivde su tiempo entre Beirut y Nueva York.


 

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