¿Kast elude o evade el pago de impuestos en Chile mediante paraíso fiscal y red de hoteles en Miami?

¿Kast evade y elude el pago de impuestos en Chile? Lo haría con esquemas que buscan borrar su huella, mientras el ciudadano común paga impuestos incluso al momento de comprar el pan o su comida.

Muchos productos en Chile tienen IVA, es decir, se paga un 19% sobre su valor. Ese dinero, en teoría, es de todos, pues pertenece al Estado y se utiliza para su funcionamiento y para financiar servicios a la sociedad.

Las personas naturales no pueden descontar este impuesto, ya que no son empresas.
Las y los emprendedores, así como las pequeñas y medianas empresas, que sí tienen calidad de empresa, también deben pagar este impuesto al Servicio de Impuestos Internos, por cada venta realizada deben declararlo y pagarlo mensualmente.

En cambio, Kast ha venido evitando este pago, trasladando empresas familiares fuera de Chile, directamente a paraísos fiscales. Algo totalmente contrario a lo que haría alguien que se autodefine como patriota.

Aunque Kast ha declarado, al menos desde 2017, que habría dejado de participar “directa e indirectamente” en las empresas del grupo familiar, los registros históricos -mediante complejos vehículos societarios- lo siguen situando como parte estructurante de un paso a paso que le permitiría continuar evitando el pago de impuestos en Chile, trasladando al extranjero sociedades que antes operaban en el país.

Se logró rastrear una sociedad clave: Latin American Real Estate Co. S.A., con domicilio en Panamá, que en 2024 absorbió a la empresa chilena Inversiones Internacionales La Florida Limitada, la cual administraba los activos hoteleros de la familia en Estados Unidos. Esto fue ratificado por los medios chilenos Interferencia y El Ciudadano.

Mediante este mecanismo, pasaron al control de la sociedad panameña los hoteles que la familia Kast mantenía en Florida: Hotel Collins, Tamiami Hotel, Orlando Hotel y University Center Hotel.

Estos mismos hoteles en Miami formarían parte de una red destinada a “esconder patrimonio”, permitiendo que, con los impuestos que no se pagan en Chile, se continúe comprando hoteles e invirtiendo en el extranjero. Una vía para perder el rastro patrimonial de José Antonio Kast en un complejo “suma y resta”, especialmente desde que se reveló su participación en los Panama Papers.

Todos estos movimientos quedaron reflejados en una fusión realizada en 2024, en la cual se declaró un capital total de US$ 45.914.682,50 bajo la sociedad panameña.

Con este vehículo societario, el grupo Kast abandonaría Chile en términos tributarios, dejando de pagar impuestos por estos negocios en el país y, con ese “ahorro”, realizaría nuevas inversiones inmobiliarias en Miami, lo que algunos denominan informalmente como “lavar impuestos chilenos”.

¿Lavado de impuestos?

El concepto de “lavado de impuestos” no existe como tal en el derecho, pero sí podría configurarse lavado de dinero si se cumplen ciertas condiciones:

• Origen ilícito de los fondos: si el dinero proviene de evasión fiscal, la cual constituye delito en muchos países.

Fases del lavado de dinero:

• Colocación: el dinero evadido ingresa al sistema financiero a través de un paraíso fiscal.
• Ocultamiento: se realizan múltiples transacciones para distanciar los fondos de su origen.
• Integración: el dinero se invierte en activos legítimos (como hoteles) para dar apariencia de legalidad.

Por otro lado, recientemente el medio Contra Pauta reveló otro entramado societario de Kast en Chile, bajo Inversiones Bravo SpA:
https://contrapoderchile.cl/inversiones-bavaro-spa-la-secreta-sociedad-de-jose-antonio-kast-de-4-mil-millones-que-fundo-cuando-era-diputado/

Según registros e investigaciones periodísticas, desde al menos 2003 la familia habría constituido en Panamá otras sociedades vinculadas a su patrimonio, entre ellas Foods & Merchandising Investments Inc., Austral Inversiones S.A., además de la propia Latin American Real Estate Investment Co. S.A.

La fusión de 2024 trasladó oficialmente el control de los hoteles en Estados Unidos desde empresas chilenas hacia la sociedad panameña, consolidando el flujo de inversiones internacionales bajo un esquema offshore.

El abogado panameño Rolando Candanedo Deneken (también mencionado como Rolando Candanedo Navarro) figura como presidente y secretario de la sociedad panameña, agregando una capa adicional de interposición formal que podría dificultar la identificación de los beneficiarios finales.