Esta semana la vocera del comando de Jeannette Jara, Nicole Cardoch, denunció públicamente a través de sus redes sociales, acoso digital por parte del exfiscal Manuel Guerra, quien es cercano al polémico abogado Luis Hermosilla. Por medio de pantallazos, la periodista mostró como Guerra le ha mandado reiterados mensajes a su cuenta de Instagram.
Cardoch subió los mensajes enviados por el exfiscal, declarando: “Señores corruptos que no se cansan de escribir”, seguida de la frase: “Abúrrase señor Manuel Guerra, amigo de Hermosilla”
En los pantallazos difundidos por la vocera del comando de Jara, se observan las reiteradas respuestas de Manuel Guerra a las historias que Cardoch publicaba en sus redes. Según la evidencia, el exfiscal le habría respondido al menos en cinco ocasiones, con mensajes que van desde breves “jajaja” hasta comentarios más extensos, como: “Qué lindo, ¿no? Liberaron a presos por delitos terroristas. No a luchadores por la liberación de Palestina”, en respuesta a una historia de Cardoch sobre la liberación de más de 1.900 palestinos en Gaza.
En conversación con El Ciudadano, Nicole Cardoch, declaró:
“El exfiscal Guerra está siendo investigado por hechos graves y tendrá que responder ante la justicia. Pero usar sus redes para atacarme por razones políticas es inaceptable, como lo sería con cualquier persona. Esta campaña está centrada en propuestas, no en descalificaciones personales. Quienes se sienten incómodos con nuestro proyecto de cambios, que lo digan con argumentos, no con acoso. Seguiremos trabajando sin miedo y con respeto”.
Cabe recordar que Manuel Guerra ocupó el cargo de Fiscal Regional de la Fiscalía Metropolitana Oriente entre 2012 y 2015, años en los que participó en casos de alto perfil como el Caso Penta-SQM y la investigación relacionada con el expresidente Sebastián Piñera y la pesquera Exalmar.
Sin embargo, su trayectoria se vio fuertemente afectada por la divulgación de conversaciones privadas con Hermosilla, en las que proporcionaba información confidencial sobre investigaciones en curso, lo que derivó en una investigación penal por posible revelación de secretos.
La denuncia de Cardoch abre el debate sobre los límites del acoso digital y el rol de quienes ocuparon cargos de poder, recordando que la participación política debería centrarse en ideas y no en ataques personales.