Fernando Villegas Darrouy… Uyuyui!!

Como ya es usual, desde hace varios años, son pocos los domingos y los movimientos sociales -que exigen una sociedad más pluralista y respetuosa– que se salvan de, por lo menos, una falacia o una descarada mentira salida de la boca de nuestro querido Fernando

Por Director

14/09/2011

Publicado en

Columnas

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Como ya es usual, desde hace varios años, son pocos los domingos y los movimientos sociales -que exigen una sociedad más pluralista y respetuosa– que se salvan de, por lo menos, una falacia o una descarada mentira salida de la boca de nuestro querido Fernando. Esta es solo una más, pero me resulta interesante porque es un raciocinio común en las mentes de posición burguesa atrofiadas por el cálculo permanente de ganancias.

Como seguramente ya lo suponen ustedes, lectores, me refiero a esta “magistral” observación: “(…) Bueno, entonces eso me habla a mí de que este es un movimiento político en todo el sentido de la palabra, y no lo estoy diciendo en mala, es un movimiento político (…) Pero qué bueno que los padres y apoderados se enteren de que ustedes realmente no estaban preocupados tanto por la calidad de la educación, sino que ustedes tienen un modelo político (…)”. La cual, aunque parezca sorprendente remata a los pocos segundo agregando: “(…) Que bueno que la gente sepa ahora que ustedes están en el fondo, lícitamente si ustedes quieren, en un movimiento político que tiene un concepto ideológico, que tiene un concepto republicano, que tiene un concepto para toda la sociedad, porque se han metido en varios temas, y que lo de la calidad de la educación fue simplemente una maniobra táctica del principio”.

Y es que a nuestro amigo no le cabe en la cabeza (por irónico que parezca) que a toda persona interesada por la educación por necesidad le interesa la política, y que a toda persona interesada por la política por necesidad le interesa la educación; no le cabe en su cabeza, positivista y moderna (en la peor de sus acepciones), que la sociedad es un todo organizado y que, por ende, cada una de sus partes no se explica sino en relación con todas las demás.

Comencemos por el principio, pongo mis fundamentos sobre la mesa:

a) Las ideas políticas no nacen de la nada, son ideas materiales e históricas. ¿Qué quiere decir esto? Pues que no fue Dios quien las puso en nuestras mentes, sino que surgen de las necesidades reales experimentadas por los hombres; necesidades condicionadas y sustentadas por nuestra biología y por nuestra cultura, y que cuando no son ideas alienadas (ideas que no responden a nuestras necesidades) tienen por objeto satisfacer dichas necesidades.

b) El sistema educativo de una sociedad está determinado, en términos estructurales, por las clases y grupos sociales hegemónicos de esa sociedad, mediante políticas educativas. O sea, son quienes están en una posición de fuerza superior en las relaciones de poder los que determinan el sistema educacional.

c) La educación de una sociedad es fundamental para producir y reproducir esa hegemonía.

d) Las políticas educativas del sistema están orientadas, en términos estructurales, a satisfacer las necesidades de la clase hegemónica y a construir un modelo de ciudadano afín a ella misma.

e) Que para que “d” se concrete, el sistema busca alienar a los sujetos que no son de la clase que detenta el poder, es decir, busca que nieguen sus necesidades en pos de asumir como propias las que, en el caso del capitalismo, la burguesía les designa.

f) Que a pesar de “b”, “c”, ”d” y “e”, la expresión fáctica del sistema está supeditada a la condición de la lucha entre las clases y grupos sociales, que se fundamentan en sus necesidades y consecuentes ideas políticas, por el dominio de los aparatos educativos y que el sistema va variando según la correlación de fuerzas entre los bandos en pugna.

A partir de ahí, entonces argumento que todo cambio en el sistema educacional, aún cuando hablemos solo de calidad, implica un cambio político como antecedente y como consecuente (Política -> Educación -> Política), pues la calidad es una categoría relativa, ya que está sujeta a un para qué y un para quién; cuando decimos que la educación formal en Chile es de mala calidad nos estamos posicionando desde la gente común, no desde la burguesía que durante todo este tiempo ha ganado plata con la ignorancia del pueblo y que educa a sus hijos en colegios con estándares internacionales. Y que cuando pedimos calidad no lo hacemos porque sí, sino por lo que implica para el desarrollo de los sujetos en la sociedad, y lo que queremos que implique la calidad es una mayor equidad y una mejor repartición de los recursos, así como un país más participativo y democrático.

Lo que queremos con una mejor calidad es disputarle la hegemonía a los poderosos y a los tiranos de nuestra patria para que nosotros, la gente común, sea un poco más libre para construir este mundo que es de todos. Si eso no es política para mi amigo Fernando, y si él no entiende eso como un objetivo de la calidad, entonces le haría bien dejar de “prostituirse” a la oligarquía, y nos haría una favor a todo el gremio dejar de presentarse como un científico social.

Por Jamadier E. Uribe Muñoz

Chiloé, 12 de julio del 2011.

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