Reflexiones sobre las actuaciones de EE.UU.: A partir de Noam Chomsky y Edward S. Herman

Por Freddy J

Por Pedro Guzmán

09/02/2022

Publicado en

Columnas

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Por Freddy J. Gutiérrez González

Históricamente, la política sistemática de los Estados Unidos (EEUU) ha venido con una actitud de neutralización ante cualquier manifestación de valores democráticos que implicaran la organización popular e igualdad de derechos, por lo cual, me atrevo a asegurar que ha venido quedando en evidencia que en EEUU no existe una democracia, sino que, su sistema de gobierno se trata de una plutocracia (forma de oligarquía en la que una sociedad está controlada por una minoría formada por sus miembros más ricos). Este sistema se ha venido conformando desde que el mundo es mundo, demostrándose mucho antes de que EEUU determinara sus áreas de influencia con la Doctrina Monroe, atravesando la Primera Guerra Mundial y diversos eventos, donde su principal objetivo siempre ha sido mantener una hegemonía evitando acciones democráticas de cualquier grupo, por ejemplo, cuando apoyó los movimientos anti-bolcheviques a nivel global, desde Rusia, pasando por Europa y Latinoamérica, entre otros.

Ahora veremos algunas tácticas de los más ricos que permanecen interrelacionados con el gobierno, expuestas por el escritor de Miedo a la Democracia: Noam Chomsky (intelectual, politólogo y activista estadounidense) que les han permitido unirse como un sólido bloque, que intentan hacer lucir como “democracia” ante sus ciudadanos y el mundo; se trata del empleo de las doctrinas de contención y disuasión y la propaganda.

Tras la Segunda Guerra Mundial y el comienzo de la guerra fría, se sistematizaron las políticas ya mencionadas (de represión de toda forma de organización social que enfrentara los intereses empresariales norteamericanos), estableciendo “las doctrinas esenciales que guiaron la política de los Estados Unidos… fueron la contención y la disuasión o, más ambiciosamente, el repliegue (de la URSS)”.  Y prosigue así: “La versión ortodoxa se esboza en términos claros y escuetos en lo que generalmente se reconoce como el documento básico de los Estados Unidos por lo que respecta a la guerra fría, el NSC 68, de abril de 1950, poco antes de la guerra de Corea, que anunciaba que «la guerra fría es, en realidad, una guerra real en la cual está en juego la supervivencia del mundo libre».”

El citado documento fue remitido al Presidente Truman por Paul Nitze, quien fue un oficial de alto rango y era considerado como el arquitecto de las políticas de defensa de los EEUU durante la Guerra fría, además de ser cofundador del  think tank (tanque del pensamiento) llamado Equipo B.

La doctrinas de contención y disuasión, justificaron todas las acciones que EEUU condujo a nivel mundial y que usaron métodos que se pueden considerar en el mejor de los casos gansteriles; de allí que, tras la Segunda Guerra Mundial, se presionó para evitar que en Alemania, Japón, Francia, Italia y Grecia, representantes de la resistencia que combatió al Fascismo y al Nazismo, que en mayor parte tenían una composición de comunistas, pudieran organizar a la población en pos de la búsqueda de derechos reivindicativos, mediante presiones que iban desde amenazar con reducir o eliminar el suministro de alimentos o retirar la ayuda económica -si algún grupo o persona catalogada como simpatizante o abiertamente comunista llegaba a alguna instancia de poder-. Por supuesto, a los venezolanos nos es bastante familiar este modo de actuar de EEUU.

Y eso no fue todo. Incluso, se llegó a restituir en sus cargos a antiguos funcionarios de los regímenes Nazi, Fascista y Japonés (sobre todos en las áreas de seguridad e inteligencia), a los fines de mantener “el orden” y evitar la “anarquía” producto de la constante “agresión comunista”. Pero, nada de eso habría podido suceder sin el fiel apoyo de un sistema blindado, estructurado y planificado, llamado: propaganda.

Un elemento de comparación sobre lo anterior, lo conseguí en un video basado en textos de Noam Chomsky y Edward S. Herman: La PROPAGANDA en la DEMOCRACIA, publicado el 17 de octubre 2020. Herman (1925-2017) fue un economista y analista de medios de comunicación estadounidenses, especializado en las corporaciones y en las relaciones que tienen con las políticas económicas. En una obra donde comparten autoría -Los Guardianes de la libertad (1988)- exponen que “en la democracia-capitalista, la opinión siempre responde a ciertos intereses… que existe una alianza entre el poder político y el poder económico que brindan camuflaje de una forma sutil -u oculta- de los regímenes totalitarios quienes se esconden tras una pantalla de libertad de prensa y de independencia de los Medios de Comunicación (mass media). Chomsky entiende las democracias como cortinas (o tapaderas) donde el verdadero operativo generalizado de los medios ocurre tras bambalinas y lo resume en cinco filtros que permiten discriminar la información publicable de la que no lo es. En otras palabras, lo que como público nos llega desde los mass media es información manipulada (o propaganda).

Para comprobar esto veamos el filtro número 5º EL ENEMIGO ÚNICO: EL COMUNISMO. O en otras palabras, ellos (los malos) contra nosotros (el público). Y me he preguntado, ¿realmente son tan malas las ideas de sistemas como el comunismo –o socialismo- que te hacen pensar en cuáles son tus derechos? Según Chomsky sucede que “los medios recurren a la figura del comunismo para promocionar el individualismo pro-empresarial o el ataque al estado de bienestar”. Un bienestar ficticio por supuesto.

Retornando a la época de la 2da guerra mundial, pero en América Latina, la aplicación de estas doctrinas mencionadas, fue ejecutada con particular entusiasmo, por lo que se apoyaron en sangrientas dictaduras militares o regímenes “democráticos” favorables a los intereses norteamericanos que no dudaban en tener mano dura al momento de implementar una fuerte y brutal represión a cualquier forma de organización popular. De allí se muestran los resultados que en la década de los 80 del siglo XX, en países como Nicaragua, el Salvador y Honduras, donde se aplicó una política de terror mediante escuadrones de la muerte, se cometían asesinatos masivos sistemáticamente diseñados para mantener a la población sumisa y sometida a un estado de permanente de miedo. Entonces… ¿Democracia?   

Así hay que mencionar, como la llamada “prensa libre” cumplió un papel importante a la hora de encubrir la sistemática violación de los derechos humanos por parte de estos regímenes y también por la labor realizada para “lavarles la cara” y mostrarlos como gobiernos comprometidos con los más altos valores democráticos defendidos por los EEUU. Sobre esta “prensa libre” aplicaremos un filtro más adelante.  

Se puede decir que el accionar de EEUU respecto a América Latina, tiene dos vertientes que se aplican en función de los intereses y las características de la población contra la que va dirigida; por un lado está la “Línea Blanda” que consiste en implementar un bloqueo económico para someter a la población con el hambre e impedirle el acceso a los insumos básicos para la vida (alimentos, medicinas, servicios públicos, etc.); la otra vertiente se llama “Línea Dura” donde se promueve a grupos radicales que buscan confrontación directa para desestabilizar el panorama político, generar un golpe de Estado o una guerra civil. Cada línea de acción se aplica por separado (o en conjunto) según las circunstancias que se establezcan.

Por ejemplo, en Chile, se aplicaron ambas líneas. En primer lugar se bloqueó a la economía chilena al punto de llevar a la población a un estado de desesperación y después, con la colaboración de las elites locales y las fuerzas armadas, ejecutaron un sangriento golpe de estado. Sin duda, otra situación bastante conocida para nosotros, los venezolanos.

Otro ejemplo sucedió con Bolivia, durante la misma época en que ocurría el golpe militar en Chile, en donde se aplicó la línea blanda y se recurrió a la presión económica para lograr el cambio de gobierno. Y, en años recientes, se puede decir que se aplicó la línea dura para derrocar al Gobierno de Evo Morales. También se podría afirmar que en Venezuela se han -y se siguen aplicando- ambas líneas.

Ahora, ¿recuerdan el término “prensa libre” con que se suele “lavar el rostro” a las democracias? Chomsky y Herman sugieren que toda noticia debe pasarse por un filtro bastante complejo y se trata del número 3º NUESTROS BENEFACTORES: se basa en “el suministro de noticias a los medios de comunicación… donde éstas ya han sido procesadas por el gobierno, las administraciones públicas, las instituciones burocráticas y las corporaciones junto a sus enormes inversiones en publicidad política de relaciones públicas”. Porque toda información que reciben los periodistas siempre está al servicio de sus benefactores (en la actualidad: las élites), una fuente primaria (que paga y se da el vuelto). Por ello, siempre hay que investigar quién (o quienes) están detrás de cada información o noticia, antes de repetirla o compartirla en redes sociales.

Con el propósito de ampliar nuestra visión, podemos mencionar ahora el filtro número 4º EL COMITÉ: éste hace hincapié en las críticas a los contenidos de los medios de comunicación. Los mencionados autores alegan que se trata de orquestar respuestas negativas por parte de las élites gubernamentales y economías, con el fin de silenciar cualquier información que pueda atentar contra sus intereses particulares. Una clave: siempre alegaran para reforzar sus noticias que defienden los intereses del lector.

En conclusión, las políticas norteamericanas, tienen como objetivo algo más profundo que el cambio de un gobierno, buscan generar un ambiente propicio para sus intereses geopolíticos y económicos, por lo que, no tiene cabida cualquier forma de organización popular o social que predique el interés nacional, la igualdad de derechos y oportunidades o la participación popular en la toma de decisiones y el diseño de políticas de Estado. Cualquiera de estos valores que se consideran democráticos en todo el mundo, son vistos como una amenaza que debe ser erradicada desde las más profundas raíces de la psique colectiva.

Un pensamiento que ilustra en todo sentido la política de EEUU y sus Clientes, que se encuentra al comienzo de la Obra de Noam Chomsky (Miedo a la Democracia), es también una patente realidad que se pretende seguir aplicando hasta el día de hoy:

“… El gobierno del mundo debería ser confiado a naciones satisfechas, que no desearan para sí mismas más de lo que tienen. Si el gobierno del mundo estuviera en manos de naciones hambrientas, siempre habría peligro. Pero ninguno de nosotros tendría razón alguna para pretender nada más. La paz sería mantenida por gente que viviría a su manera y que no sería ambiciosa. Nuestro poder nos situaría por encima de los demás. Seríamos como hombres ricos que viven en paz en sus moradas. Winston Churchill”.

Para cerrar, comparto con ustedes mis reflexiones… según las usuales formas de actuar de EEUU… ¿Tienen realmente una democracia como sistema de gobierno? ¿Será EEUU realmente una nación satisfecha, que debe gobernar el planeta entero? ¡Hasta el próximo artículo! 

@freddygutierrezgonzale

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