Preocupante: Chile pierde su tercer partido consecutivo y cae en el debut ante Argentina

Era el último partido de la fase de grupos y el más esperado de todos. La final reeditada de la última Copa América de Chile encontraba frente a frente a una Argentina favorita pero sin su gran figura, Lionel Messi en cancha. La Roja, que nunca había vencido a la albiceleste en 90 minutos en la historia de este torneo, en cambio, contaba con equipo titular incluyendo a Claudio Bravo y Eduardo Vargas como principales novedades respecto de los últimos amistosos.

Con un Levi’Stadium repleto y arbitraje del uruguayo Daniel Fedorczuck, en los primeros minutos del partido fue el tandem de Marcos Rojo y Ángel Di María quienes marcaron protagonismo ganándole la espalda a Mauricio Isla. Allí, Gaitán, el reemplazante de Messi metió un cabezazo al horizontal. Luego, y tras una tibia llegada de Vargas para los chilenos, otra vez «El Fideo» puso de cabeza a la defensa roja. Más aún, a los ‘7 minutos, el delantero de PSG ya apremiaba por tercera vez la estantería de Claudio Bravo.

Medel salvó una opción clara tras carrerón de Di María, eso tras robarle una pelota a un confuso Alexis Sánchez a los veinte minutos. Hubo córner y tras el centro, Rojo metió un cabezazo que apenas se fue desviado. Argentina se paraba mejor y ponía una presión permanente que cortaba el circuito chileno en el medio.

La primera de Chile recién llegó a los 25’ cuando Vidal recuperó una pelota y Alexis inició el contragolpe que Beausejpur desperdició con un centro exigido. La clave del partido pasaba por el atildado control que Augusto Fernández y Javier Mascherano hacían sobre la dupla roja de Aránguiz y Díaz. Y allí desequilibraban la brega.

Pero a la media hora, una mala salida de Funes Mori dejó a Díaz con el balón que le cede a Vidal y el «Rey Arturo» con precisión quirúrgica dejó a Sanchéz en buena posición. El remate del tocopillano iba con dirección a las mallas y Romero mandó al tiro de esquina. Fue la más clara para Chile. Una que a los ’42 volvió a ver a Sánchez como el factor de peligro propiciando la subida de Beausejour que Otamendi despejó cuando buscaba a un desaparecido Eduardo Vargas.

El equipo de Martino siguió dominando, ganando las bandas y con poca precisión en la jugada final. Chile, impreciso y con individualidades bajas, se dedicó a esperar el final del primer tiempo, el que cerró un marcador en blanco más favorable para el campeón de América que para su rival.

Ya en la etapa final, Chile trató de sorprender, primero con un remate de Marcelo Díaz que obligó a una tapada de Romero. Tras el córner, Jara metió un cabezazo desviado en solitario. Pudo ser la apertura de la cuenta. La confianza no amainó y Sánchez ya probaba las manos del golero trasandino a los ‘3 del complemento.

Pero esa presión tuvo su lápida. Porque el arranque prometedor propició el contragolpe tras una mala salida de Aránguiz, la que quedó para Di María, el mejor jugador del partido que apareció destapado por la espalda de Isla tras el pase de Banega y definió al primer palo. Argentina daba el golpe cuando recién iban cinco minutos de la segunda parte.

Chile volvió a salir a presionar y tras la lesión de Eugenio Mena, Fabían Orellana ingresó para darle una variante ofensiva al equipo de Juan Antonio Pizzi, entregándole rotación en el sector ofensivo. Pero se perdió una ocasión clara tras un centro de Beausejour.

Pero calcadamente, Di María esta vez se vistió de habilitador y aprovechó que Banega, nuevamente por la espalda de Isla volviera a repetir la definición al primer palo. Dos a cero en honor al pragmatismo argentino con individualidades marcadas. Es más, Bravo evitó el tercero cuando Banega nuevamente llegaba a las barbas mismas del portero de Barcelona.

Chile intentaba con más empuje que buen fútbol, aunque en una llegada bien urdida, Orellana volvió a fallar a la entrada del área. Vidal trataba. Sánchez correteaba, Pizzi hacía cambios irrelevantes y Argentina esperaba la contra. Se intentó pero definitivamente no se pudo. Al frente hubo un rival que supo matar cuando fue necesario.

Y en el último minuto del descuento, José Pedro Fuenzalida metió un cabezazo tras un centro de Orellana y puso un descuento que algo de justicia le entregó al marcador final. El próximo duelo de Chile será este viernes en Boston, para jugar ante Bolivia, juego donde está obligado a ganar. En el otro duelo del grupo D, Panamá le ganó por dos a uno a la selección altiplánica.