Del puerto de San Antonio al norte de China: la ruta que está transformando el comercio entre Chile y Asia

En los supermercados de Tianjin, una de las ciudades portuarias más importantes del norte de China, los consumidores pueden encontrar una creciente variedad de productos chilenos como cerezas, vinos, mariscos y frutos secos. Esta presencia se debe, en gran parte, a la apertura de nuevas y mejores rutas marítimas directas que conectan América Latina con China, reduciendo tiempos y costos logísticos.

El «expreso de las cerezas»: un canal estratégico

Una de las rutas más destacadas es la conocida en China como el «expreso de las cerezas», que une el puerto de San Antonio, en Chile, con Tianjin. Inaugurada en enero de 2024, esta vía permite satisfacer la alta demanda de cerezas chilenas durante su temporada de cosecha, que va de noviembre a febrero.

Anteriormente, estas frutas frescas llegaban principalmente a los puertos del sur de China, como Shanghai y Shenzhen, para luego ser transportadas por tierra al norte; mientras que ahora el desembarco de forma directa en Tianjin acorta significativamente la distancia de transporte.

Según el Grupo del Puerto de Tianjin, solo en 2024, el «expreso de las cerezas» completó más de 40 viajes, mientras que en enero de este año, aproximadamente 30.000 toneladas de cerezas chilenas llegaron a Tianjin por esta ruta.

Tecnología y coordinación para garantizar la frescura

Lograr que los productos de Chile lleguen frescos y en óptimas condiciones a los mercados del norte de China exige una logística muy precisa, y más en el caso de la cerezas, que son frutas delicadas y sensibles a los cambios de temperatura y humedad.

Por tal motivo, la refrigeración en los contenedores debe funcionar sin interrupciones durante el transporte y el trámite aduanero.

Para agilizar y mejorar el proceso, la Aduana de Tianjin trabaja en estrecha coordinación con las compañías navieras por adelantado, de este modo, obtiene con anticipación los horarios de los buques y los detalles de los contenedores. Asimismo, le permite desarrollar un plan de descarga detallado y sostienen reuniones con los importadores, agentes, terminales y sitios de inspección para conocer las necesidades y coordinar la programación de los camiones de contenedores.

Además, el puerto implementó un sistema de gestión inteligente que rastrea en tiempo real la llegada, descarga y transporte de mercancías.

La supervisión aduanera se integró en las operaciones portuarias, con la finalidad de garantizar que el despacho se complete inmediatamente después de la descarga.

«Luego del trámite aduanero en el puerto de Tianjin, las cerezas frescas chilenas pueden llegar a nuestro mercado en unas dos horas», afirmó un miembro del personal del mercado agrícola Haijixing, uno de los principales mercados mayoristas de Tianjin, consignó la agencia Xinhua.

Más allá de las cerezas: la diversificación del comercio

Aunque las cerezas son el producto estrella, otros rubros chilenos están ganando terreno. Mariscos congelados, frutos secos y vinos llegan a través de Tianjin para distribuirse a mercados clave como Xinfadi en Beijing y Gaobeidian en la provincia de Hebei, donde la presencia de productos provenientes de nuestro país sigue creciendo año tras año.

El embajador de Chile en China, Pablo Arriarán Ahumada, subrayó el potencial de esta ruta: «Estamos ansiosos por fortalecer aún más este portal. Tianjin puede ser un eje central en la estrategia de Chile para posicionarse en China, no solo para productos frescos y alimentos, sino también para los bienes y servicios intermedios», afirmó.

«Estamos trabajando para mejorar nuestra conectividad con las ciudades del interior de China, donde está creciendo la demanda de productos de alta calidad, seguros y trazables, como los de Chile», apuntó, en declaraciones recogidas por el medio citado.

Comercio bilateral en expansión

Este año se cumplen 55 años de relaciones diplomáticas entre Chile y China, y el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambos países, el primero que el gigante asiático firmó con una nación latinoamericana, ha sido un factor clave en el crecimiento del intercambio comercial entre las dos naciones.

Empresas como COSCO Shipping ya operan servicios semanales directos entre los principales puertos chinos, incluyendo Shanghai y Ningbo, con al puerto de San Antonio, en Chile.

«Transportamos mercancías chinas, incluyendo automóviles, productos electromecánicos y prendas de vestir a Chile, y traemos productos frescos chilenos como frutas y carne en viajes de regreso», explicó un representante de COSCO durante la III Exposición Internacional de la Industria Naviera de Tianjin, celebrada del 12 al 14 de junio.

Por su parte, el embajador Arriarán destacó que «las industrias de transporte marítimo y logística de China proporcionan estabilidad al comercio mundial. Hacen que sea más fácil y más eficiente realizar el comercio».

Con rutas como el «expreso de las cerezas», Chile consolida su presencia en el gigante asiático, abriendo nuevas oportunidades para sus exportaciones