Juzgado mantiene en prisión preventiva a ex jefe de inteligencia del Ejército, Schafik Nazal, por intercepciones telefónicas ilegales

El 7° Juzgado de Garantía de Santiago rechazó este martes la solicitud presentada por la defensa y decidió mantener en prisión preventiva a ex director de inteligencia del Ejército, Schafik Nazal, imputado como autor de interceptación de comunicaciones y falsificación de instrumento público.

Cabe recordar que el pasado 09 de mayo la defensa de interpuso un recurso de apelación para intentar revertir la prisión preventiva, que cinco días atrás había ordenado en su contra el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago,  en el marco de la investigación por el caso de espionaje telefónico.

En concreto, pidieron que la Corte de Apelaciones de Santiago rebajara la prisión preventiva y la reemplazara por arresto domiciliario nocturno, entre las 22:00 y 06:00 horas.

Operación Topógrafo

El Consejo de Defensa del Estado (CDE) se querelló contra el exministro de la Corte de Apelaciones de Santiago Juan Antonio Poblete y del exjefe de Inteligencia del Ejército, Schafik Nazal, luego de que el Ministerio Público determinara que ambos se coordinaron para interceptar una serie de teléfonos celulares de personas de “interés”, entre los que se encontraban periodistas y exmilitares que denunciaron corrupción al interior de la institución castrense, en el marco de la llamada “Operación Topógrafo”. Hechos que se remontan al año 2017 y principios del 2018.

Tanto el exdirector de Inteligencia del Ejército, como el exministro de la Corte de Apelaciones, Juan Antonio Poblete, fueron formalizados por 19 delitos, 12 correspondientes a interceptación indebida y 7 por falsificación de instrumento público.

En esa oportunidad, el juez del tribunal, Jaime Fuica, decretó las medidas cautelares de prisión preventiva para ambos imputados.

En la audiencia, el fiscal de Alta Complejidad, Jaime Retamal, expuso que “ambos imputados burlaron dolosamente las exigencias legales, confeccionándose una apariencia de autorización legal, sin otorgarse la debida autorización judicial.

Esto, según el persecutor, se hizo a través de pequeños oficios que eran elaborados por Nazal y firmados por Poblete. En ellos se habrían utilizado nombres falsos para ocultar las verdaderas identidades de sujetos de interés, entre ellos, el capitán del Ejército, Rafael Harvey y el periodista, Mauricio Weibel.

“Se trata de delitos que se ejecutan concertadamente y donde claramente los dos sabían. El señor Poblete en vez de cumplir con su función jurisdiccional, se prestó para servir de instrumento”, acusó en la instancia María Inés Horvitz, abogada del CDE.

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