Cinep: Grupos paramilitares asesinan a quienes reclaman la tierra en Colombia

Una gran cantidad de asesinatos a líderes sociales se cometieron contra reclamantes de tierras por parte de grupos de origen paramilitar, así lo indicó un reciente informe del Centro de Investigación y Educación Popular, programas para la Paz, (Cinep).

Durante el año 2017,  se mostraron 22 casos en contra líderes de renovación de tierras, en  el departamento del Chocó (noreste), seguido del Valle del Cauca (regiones andinas y del pacifico), Córdoba (norte), Antioquia (noreste) y Arauca (este).

En el municipio de Carmen del Darién, Chocó, se contabilizaron 4 casos. Según información ofrecida por  padre jesuita Javier Giraldo, directivo del Cinep, la gran mayoría de estos asesinatos los han realizado los grupos de origen paramilitar.

Para Javier Giraldo, S.J., “el lenguaje oficial se ha dedicado a cambiarles el nombre, su naturaleza o sus características. Pero en la información del Banco de Datos se demuestra que no es así (…) Vemos la comparación entre los responsables de las violaciones más graves de los Derechos Humanos en este último periodo que se destacan la incursión de los grupos paramilitares».

El análisis subrayó  “que la mayor responsabilidad es atribuida a grupos paramilitares quienes utilizaron la amenaza como método de victimización con 609 casos”.

A esta cifra, le sigue “la Policía Nacional quienes implementaron acciones represivas especialmente por medio del Esmad, con un total de 540 victimizaciones, entre ellos 31 ejecuciones extrajudiciales y 134 detenciones arbitrarias”.

Por último “las acciones por parte del Ejército Nacional aumentaron en el 2017 de manera significativa con un 22% más en comparación con el año 2016, con 141 victimizaciones”.

El estudio del Cinep,  señala que las ejecuciones extrajudiciales, calificadas como falsos positivos, no han cesado.

Para Luis Guillermo Guerrero, director de Cinep/PPP, existen “tres conclusiones importantes sobre el informe: primero, que no se ha reducido la violencia, sino que han variado los métodos con que se ejerce; segundo, que el Estado y la sociedad tienen un compromiso con las víctimas que deben asumir; y tercero, que hay fuerzas políticas que están desestabilizando la implementación de los acuerdos de paz”.

El documento del Cinep dentro de sus propósitos busca ayudar a reducir la vulnerabilidad de las víctimas,  y sostiene que la desinformación  de lo que ocurre blinda a los victimarios y ayudando a los criminales. “Poner en conocimiento público lo ocurrido sirve como presión moral para que tales hechos no se repitan”.

Finalmente, los realizadores señalaron  no poder  hablar de cifras precisas, porque en muchas regiones colombianas impera aún el miedo a denunciar, e incluso reciben denuncias meses o años después de los hechos.