Empoderar a mujeres en sistema agro acabaría con hambre de 45 millones

De acuerdo a la FAO, el género femenino obtiene peores condiciones laborales y sueldos más bajos que los hombres

Santiago. Lograr la igualdad de las mujeres en el sistema agroalimentario podría acabar con el hambre de 45 millones de personas en el mundo, según un informe divulgado este jueves por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

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«Si abordamos las desigualdades de género endémicas en los sistemas agroalimentarios y empoderamos a las mujeres, el mundo dará un salto adelante en la consecución de los objetivos de poner fin a la pobreza y crear un mundo sin hambre»

Qu Dongyu
Director general de la FAO

Resolver las inequidades que enfrentan las mujeres en el trabajo agrícola, dijo, permitirá alcanzar sistemas agroalimentarios «eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles».

De acuerdo con la FAO, las mujeres constituyen el 36 por ciento de los trabajadores del sistema agroalimentario mundial, una cifra que va en aumento debido al alza de la emigración masculina.

Sin embargo, las mujeres obtienen peores condiciones laborales y sueldos más bajos que los hombres en trabajos irregulares, informales, a tiempo parcial, poco cualificados o como mano de obra.

Acabar con esas disparidades productivas y salariales, argumenta el estudio, subiría el Producto Interno Bruto mundial en un billón de dólares y reduciría la inseguridad alimentaria para decenas de millones de habitantes.

Además, incrementaría los ingresos de 58 millones de personas y daría mayor resiliencia a 235 millones de personas.

¿Qué recomienda la FAO?

Entre las recomendaciones para terminar con la inequidad en el agro y alcanzar sistemas más justos y sostenibles, la FAO apostó por subsanar las carencias relacionadas con el acceso a activos (tierras, insumos) y a tecnología y recursos.

Además, las intervenciones para mejorar la productividad de las mujeres consiguen buenos resultados cuando abordan cargas como los cuidados y el trabajo doméstico no remunerado, así como la educación, la formación y la tenencia de tierras.

El acceso a guarderías también tiene un notable efecto positivo en el empleo de las madres, mientras que los programas de protección social han demostrado aumentar el empleo y la resiliencia de las mujeres, concluyó el organismo internacional.

Titulada «La situación de las mujeres en los sistemas agroalimentarios», es la primera publicación en abordar esta problemática desde 2010.

Por Agencia Xinhua

Foto: Internet

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