El empresario Elon Musk expresó su inconformidad con el nuevo plan fiscal impulsado por el presidente Donald Trump, asegurando que las medidas aprobadas comprometen su labor como asesor gubernamental orientado a mejorar la eficiencia del Estado. La declaración del fundador de Tesla y SpaceX surge en medio del creciente distanciamiento que ha mostrado respecto a la actual administración, de la que formó parte a través del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés).
Musk cuestionó el impacto económico del proyecto aprobado por la Cámara de Representantes, el cual, según la Oficina de Presupuesto del Congreso, aumentaría la deuda nacional en alrededor de tres billones de dólares en la próxima década. Desde su rol como asesor especial, el magnate se ha centrado en reducir el gasto federal y promover una gestión pública más austera. Sin embargo, considera que el plan contradice esos principios al expandir el déficit y aumentar el gasto.
Durante una entrevista concedida a la cadena CBS, Musk se mostró frustrado por la aprobación del paquete legislativo, conocido coloquialmente como el “gran y hermoso proyecto de ley”, una frase empleada por el propio Trump. Aunque evitó ataques directos, subrayó que una ley puede ser “grande” o “hermosa”, pero dudó de que pueda ser ambas cosas al mismo tiempo, señalando una discrepancia con el enfoque adoptado por el Ejecutivo.
La propuesta legislativa no solo extiende las rebajas fiscales del mandato anterior de Trump, sino que también incluye nuevos recortes de impuestos y un aumento en el gasto para reforzar la frontera y aplicar políticas migratorias más estrictas. Estas medidas serían parcialmente financiadas mediante reducciones en programas de asistencia social, lo que ha generado críticas dentro y fuera del Partido Republicano.
A pesar de haber sido un aliado cercano al inicio de la administración, Musk ha ido disminuyendo su presencia en el equipo asesor de Trump. Ya en abril había anunciado que reduciría su participación en DOGE a uno o dos días por semana, citando motivos personales y empresariales, especialmente tras los resultados negativos presentados por Tesla durante el primer trimestre del año, donde sus beneficios netos cayeron un 71 %.
Véase también: Trump afirma que Canadá tendría que pagar millones de dólares para unirse al sistema «Cúpula Dorada»
Aunque Trump ha elogiado reiteradamente el trabajo de Musk al frente de DOGE, asegurando que sus recomendaciones han generado importantes ahorros al Estado, las tensiones recientes reflejan una brecha cada vez más visible entre el empresario tecnológico y la Casa Blanca.
Foto: Redes
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