España protestará ante el Vaticano después de que el nuncio dijera que el Gobierno «había resucitado a Franco»

«La Iglesia tiene que pagar impuestos como lo hace en Francia o Italia porque es justicia social», afirmó la vicepresidenta del Gobierno español, Carmen Calvo

La vicepresidenta del Gobierno de España, Carmen Calvo, anunció este lunes que entre hoy y mañana presentarán una protesta formal ante el Vaticano por la «injerencia» que han supuesto las afirmaciones del nuncio del Papa que sostenían que el Ejecutivo de Sánchez había «resucitado a Franco» por su intención de exhumar al dictador.

En una entrevista en la Cadena Ser, Calvo calificó las palabras del nuncio como «absolutamente impropias de cualquier legación diplomática» e informó una respuesta que será «contundente». Además, la vicepresidenta ha sostenido que «el nuncio se ha manifestado en contra de una ley» y que espera que «el Vaticano ponga las cosas en su sitio».

A su juicio, detrás de este proyecto existen «motivos, sobre todo políticos» e «ideológicos». «Está detrás una ideología de algunos que quieren de nuevo dividir a España», defendió el Nuncio.

Calvo responde contrariamente a la opinión de Fratini de la Santa Sede que, según mantiene el Gobierno, se ha comprometido a «no obstaculizar» la exhumación. «Espero que el Vaticano de alguna manera ponga las cosas en su sitio y se cumpla lo que acordamos», cita El Mundo.

Aunque la política califica los sucedido como «absolutamente improcedente e inaceptable«, sostiene que la posición del representante del Vaticano no le ha «extrañado» debido a que ya tenía conocimiento de cuál era su postura.

Dejar a Franco en paz es «mejor»

El nuncio apostólico en España, Renzo Fratini, en una entrevista concedida a Europa Press el domingo, dijo que desde el Ejecutivo «han resucitado a Franco» y que «dejarlo en paz era mejor», sosteniendo que «no ayuda a vivir mejor recordar algo que ha provocado una guerra civil».

Para Fratini, detrás de esta decisión del Gobierno español se encuentran motivos «políticos e ideológicos», «de algunos que quieren de nuevo dividir España«. Además, el embajador del Vaticano pidió «olvidar el mal» y comparó a quienes «llaman dictador» a Franco con quienes dicen que liberó «a España de una guerra civil». En este sentido, consideró que no habría que seguir peleando «sobre si tenía razón o culpa».

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