Comienza segunda vuelta electoral en Perú

La segunda vuelta electoral peruana tuvo hoy un inicio tranquilo, con retrasos y con dificultades organizativas, y con los finalistas neoliberales, Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski, enfrentando de distintas formas la jornada

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La segunda vuelta electoral peruana tuvo hoy un inicio tranquilo, con retrasos y con dificultades organizativas, y con los finalistas neoliberales, Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski, enfrentando de distintas formas la jornada.

La jornada comenzó bajo fuertes medidas de seguridad a cargo de militares y policías en los colegios electorales, y la votación empezó en muchos casos con retraso por ausencias de miembros de las mesas y negativas de los electores a reemplazarlos pese a la obligación legal de hacerlo.

La atención pública se concentró en el tradicional «desayuno electoral», que los candidatos, en empate técnico según encuestas confidenciales, realizaron de distinta manera y cada uno con las secuelas de la campaña electoral, oficialmente terminada el pasado viernes.

En el desayuno electoral de Fujimori, en un restaurante del exclusivo barrio de La Molina, la candidata lanzó un llamado a «votar sin miedo y pensando en el país, es un día de fiesta» y tuvo que responder preguntas sobre los temas espinosos que afectaron su campaña y golpean sus aspiraciones.

Fue notoria la ausencia de su candidato a la vicepresidencia, José Chlimper, involucrado en un caso de adulteración de un audio para desacreditar la denuncia de que la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) investiga a quien hasta el escándalo era su más cercano colaborador, Joaquín Ramírez.

Sobre la ausencia, Fujimori argumentó que prefirió compartir el desayuno con su familia y personas y sus colaboradores técnicos y no con dirigentes políticos, sin más comentarios sobre uno de los temas que, según analistas, le ha hecho perder votos.

También fue consultada sobre el hallazgo de un teléfono móvil en la celda en la que cumple su condena Vladimiro Montesinos, exasesor presidencial del padre de la candidata, Alberto Fujimori, también encarcelado por crímenes de lesa humanidad y corrupción.

El caso es investigado por el Ministerio Público y el protagonismo mediático de Montesinos abonó a la campaña de amplios sectores que resaltan la relación de ella con el gobierno de su padre (1990-2000).

Keiko Fujimori manifestó su extrañeza por la divulgación del caso por un diario local, justo el día antes de los comicios y dijo que deben ser sancionadas las autoridades que permitieron a Montesinos el privilegio de tener un teléfono en la cárcel de alta seguridad que lo aloja en la base naval del vecino puerto del Callao.

El desayuno electoral de Kuczynski fue más festivo y se realizó en un barrio popular, humilde y hasta peligroso, Mendocita, donde Kuczynski, ante preguntas de la prensa y los vecinos, prometió trabajar por mejorar la vida de los pobladores y promover la igualdad.

Esas declaraciones motivaron críticas televisivas porque podrían interpretarse como proselitistas, lo que está prohibido desde el pasado viernes por la legislación electoral.

Vía Prensa Latina

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