Gobierno y oposición acuerdan ampliar los recursos para universidades privadas

Bajo el argumento de no continuar discriminando a los más vulnerables y de la libertad de enseñanza, entendida no como la idea de crear proyectos educativos que las personas puedan elegir, sino más bien con la libertad de levantar colegios como buen negocio , la derecha se reunió con el gobierno y desistió de la idea de llevar la gratuitad y las becas al Tribunal Constitucional.

En este escenario, duras críticas realizó el presidente de la comisión de educación de la Cámara, Alberto Robles (PRSD), luego de la negociación que tuvo que llevar a cabo el gobierno con la Nueva Mayoría y la oposición, ante la amenaza de Chile Vamos de llevar la glosa de gratuidad y becas al Tribunal Constitucional. En ese sentido, el diputado cuestionó la imparcialidad del tribunal y señaló que “esto que estamos haciendo hoy día en la glosa de educación, es para evitar un pronunciamiento de un tribunal que no es representativo de lo que la sociedad chilena requiere, ahí tenemos un grave problema institucional. Me parece que esto es de la máxima gravedad”.

El parlamentario, además, calificó como “inaceptable” el haber tenido que recurrir a la negociación. “Eso es porque no está cumpliendo el rol que le corresponde. Cuando el TC se politiza en la forma en que todos saben que ha ocurrido, en términos de que ya se sabe anticipadamente cómo van a votar los ministros, quiere decir que tenemos un mal tribunal, que no da garantías a todos los sectores”.

“El Tribunal Constitucional no está cumpliendo con su rol de proteger la constitución, está politizada y lo único que hace es salvaguardar los intereses de un sector. Es por eso que la oposición amenaza con ir al TC y poner en riesgo la gratuidad de todos los chilenos y nos obliga, aceptar sus condiciones para no dejar sin gratuidad a los estudiantes. El valor de la gratuidad es importante y lo único que pudimos rescatar es un programa de fortalecimiento de las Universidades del Estado con un financiamiento a corto y mediano plazo.”, señaló el diputado Robles.

 DERECHA GANA EL «GALLITO» 

La derecha gana en esta partida, y así lo expresó el diputado (RN) Alejandro Santana, quien  valoró la aprobación de la glosa de gratuitad en educación superior, asegurando que con este acuerdo se disminuye la discriminación hacia algunos estudiantes. “Es un avance, logramos flexibilizar la posición del gobierno, lo que implica que a igualdad de vulnerabilidad y a igualdad de condiciones de una universidad es materia de acreditación tengan becas equivalentes. Yo creo que ahí se ha dado un paso importante que hoy día estudiantes que estaban derechamente excluidos van a estar incorporados a una propuesta de gratuidad focalizada”.

A su vez, la aprobación de la glosa de gratuidad, fue rechazada enérgicamente por algunos diputados, como Giorgio Jackson, quien señaló que “serían más honestos los parlamentarios que intentan tergiversar este debate, si transparentaran su fe ciega en el mercado como mejor asignador de bienestar, en vez de hablar de discriminaciones.  Quieren evitar al máximo posible que este debate democrático pueda zanjar algunas cuestiones importantes en términos de principios, para permitir entonces que cada estudiante haga lo que quiera y sea el Estado el que financie a planteles que están orientados con fines privados, ojalá lo más ajeno al debate público y con las menos restricciones posibles”.

VOTAR BAJO AMENAZA

La diputada (PC) Camila Vallejo indicó que “hicimos un esfuerzo tremendo para avanzar en gratuitad con cierto marco de fiscalización para que los recursos de la gratuidad para nuestros jóvenes fueran entregados con un marco de probidad, obviamente para instituciones que garantizaran mínimos de calidad y pensando también en la gobernancia de estas instituciones. Hoy nuevamente tenemos la amenaza del TC y creo que lo que se ha venido planteando ha sido un gran esfuerzo del gobierno por evitar el TC, sin embargo a mí y a lo que esta bancada le preocupa es que por no ir al TC estemos aumentando recursos públicos a través de la Beca Bicentenario a instituciones que sabemos que han estado lucrando por escándalos que incluso hemos conocido por la prensa, como el caso Laureate”. Sin embargo, el Partido Comunista votó favorablemente a la propuesta, pues argumentaron que garantiza un avance en los fondos basales para las universidad públicas y del Estado.

El diputado Jackson insistió en que este debate no debe tratarse sólo de discusiones de dinero, sino que deberá marcar un precedente que se deja en una discusión en cuanto a políticas educativas,  por lo que espera que no exista una liberalización mayor de los recursos en forma de voucher.  Además, junto al diputado Gabriel Boric fueron enfáticos en indicar que esto se trató de un chantaje, de actuar bajo amenaza, lo que es por sobretodo una derrota para la democracia.

Por Silvia Gutiérrez González