Reportaje

Los contactos políticos de la ex secta de Pirque

La comunidad "mística" de la trasandina Paola Olcese vuelve a estar en el centro de la atención. El Ciudadano viajó a la Región de Atacama e investigó las denuncias de una comunera diaguita, el padre de una bailarina que falleció luego de un parto y la madre de una joven que no pudo contener las presiones de sus hermanos de fe. Todas ellas apuntan al carácter destructivo del grupo y a un supuesto manto de protección que se deriva de sus conexiones con el poder.

Por Matías Rojas

03/03/2016

0 0


Valeriano0

En familia dice vivir, asentada en las recónditas alturas de Juntas de Valeriano en el valle del Huasco, la comunidad dirigida por la ex modelo argentina Paola Olcese, conocida en 2007 a raíz de la muerte de la profesora de baile Jocelyn Rivas, fallecida e inhumada ilegalmente a consecuencia de una descompensación tras un parto no hospitalario.

Sus miembros dicen estar empujados a mantener un estricto hermetismo para defenderse de los prejuicios de la prensa, alimentados por historias de personas que supuestamente no comprenden su contacto con la divinidad, o que simplemente no los conocen.

Pero Ana del Tránsito Bordones, diaguita con más de 80 años, madre de diez hijos, sí los conocía.

Cuando El Ciudadano visitó uno de los tres terrenos que Olcese y compañía han usado como refugio esperando la migración masiva de sus integrantes desde Lo Zárate, Región de Valparaíso, con más de 20 niños en los hombros, la conversación sólo pudo concretarse en la puerta del asentamiento “natural” de carpas y cultivos, internado en la precordillera.

Valeriano2Se les preguntó por la señora Ana. “Tiene una relación maravillosa con nosotros”, dijeron. Pero la mujer tiene otra versión. Para ella “se volvieron malos” porque Paola, cabecilla del grupo, trató de agredirla y a una de sus hijas la amenazaron de muerte, exhibiéndole un arma de fuego mientras la agarraban de los brazos.

Los carabineros del Retén de Conay tomaron nota. Sin embargo, a la Fiscalía Local de Vallenar sólo han llegado denuncias que ponen como víctimas a la ex comunidad de Pirque y no a la familia Bordones.

A mediados de febrero, la Corte de Apelaciones de Copiapó ordenó a la denominada secta el desalojo de un predio ocupado sin el consentimiento de la señora Ana en el sector de Los Pozos Bajos de Valeriano. Fue un camino largo y difícil, afirma la comunera, ya que no ha contado con el apoyo de sus pares diaguitas. Ni las organizaciones locales ni la alcaldesa Carmen Bou Bou han tomado palco en el asunto.

La entrevista que El Ciudadano pidió con la edil fue negada por el jefe de comunicaciones del municipio, Osvaldo Oyarce. Éste afirmó que los denunciados “no molestan a los vecinos” y que el gobierno comunal de Alto del Carmen “no tiene ningún punto de vista” sobre el conflicto.

Funcionarios municipales que hablaron en condición de anonimato aseguraron que la alcaldesa tiene un pariente al interior de la comunidad.

«OCULTARON SU MUERTE»

Un desamparo de características similares, luego de su encuentro con el movimiento religioso de Paola, dice haber sentido Larry Rivas, padre de la bailarina Jocelyn, y Ana Fernández González, madre de Gracia Francisca López, adolescente que se trastornó cuando no la dejaron continuar con una relación amorosa que mantenía fuera de la colectividad.

Rivas se acuerda nítidamente cuando Nataniel Requena, pareja de la profesora de danza, llegó a su casa de Copiapó cargando en brazos a Purísima, la bebé que su hija dejó en este mundo antes de morir.

Nataniel se hacía acompañar por el pintor Roberto Stack Henríquez, uno de los fundadores del grupo cuya ex mujer creó, a fines de los ’60, la llamada “Iglesia del Amor” de Puente Alto. El prelado de la época denunció que la organización religiosa, que juraba recibir mensajes de salvación extraterrestre, practicaba supuestas orgías y ritos satánicos.

“Cuando Jocelyn murió, lo ocultaron. Tuvimos una pelea en el tribunal por la tuición de Purísima. Nataniel reclamó a la niña con la mamá, una concejal PS de Santiago. Al abogado que tomamos no lo dejaron ni hablar. Estaba tan arreglado el tema que yo me fui en contra de la jueza. ¿Cómo iban a dar mi nieta a una persona que no supo cuidar de su mamá?”, dice Larry.

Valeriano1Bordeando los 8 años, Purísima es una de las niñas que ha sido avistada últimamente en los predios de Juntas de Valeriano.

En la segunda mitad del año pasado se llevó a cabo otro parto “natural” en la comunidad. La lactante Vida Gotlieb González y su madre llegaron seis horas después al Hospital de Vallenar. El centro asistencial diagnosticó un factor de riesgo por las complicaciones que ambas presentaban. La mamá se negó a quedar bajo observación y la pediatra que la atendió no tuvo más opción que denunciar el hecho a Carabineros como una posible vulneración de los derechos de la menor.

«CASI YIHADISTA»

Junto con la historia de Larry está la de Ana Fernández, cuartelera del Cuerpo de Bomberos de Huasco Bajo que desertó de la secta y compartió sus vivencias con El Ciudadano.

Relata que a su hija Francisca le dijeron que “tenía un demonio adentro”. La entidad supuestamente le impedía ver el camino deparado a ella por “El Señor”, quien dispuso unirla sentimentalmente con otro varón al que ella sólo quería como amigo.

Con casi 20 años y sumida en la depresión, fue expulsada del círculo de Lo Zárate por sus antiguos hermanos de fe. Al poco tiempo bajaron sus defensas y cayó grave en el Hospital de Vallenar, falleciendo de una apendicitis.

“Supuestamente Cristo habla a través de Olcese. La gente siempre está condicionada a hacer caso a la orden que se le da. Ella tiene una cosa casi militar, casi yihadista. Se ha dicho que está enferma, que sufre delirio místico. Pero por lo que yo viví adentro tengo la sensación de que es una mujer muy inteligente. A lo mejor quiere ganarse la vida de una manera fácil y nos convenció. Por lo pavos que éramos, todos caímos”, cuenta la señora Fernández.

Aún queda un hermano de Francisca en las garras del “delirio místico mesiánico”, diagnóstico del psiquiatra del SML Ítalo Sigala que permitió a Paola Olcese evitar la cárcel. Fue declarada inimputable por el delito de homicidio por omisión a los ojos de la justicia. Pese a esto, y al incidente de 2012 en que resultaron quemados dos de sus hijos, ella conserva la tuición de los menores.

Familiares que visitaron hace algunos días a Ian López Fernández, quien permanece desconectado del resto del mundo en Juntas de Valeriano, aseguran haber notado las precarias condiciones de vida de los menores de la comunidad: escaso acceso al agua, pocas prendas de vestir y baños insalubres.

UN COLCHÓN PARA SENAME

El Ciudadano pidió hablar en reiteradas ocasiones con la Dirección Regional del Servicio Nacional de Menores de Copiapó. Uno de los objetivos era conversar sobre la carta que el Instituto Chileno de Seguridad Ciudadana, en representación de los abuelos de algunos infantes, hizo llegar a manos del organismo en Santiago, levantando la alarma sobre el delicado entorno en que se encuentran.

La respuesta fue categórica: Sename no se referirá al asunto.

El 25 de febrero, prácticamente todo el equipo del Sename copiapino se dejó caer en el terreno en disputa de Paola Olcese y su pareja Nicolás Carrión para una visita de inspección. Testigos dijeron a este medio que los funcionarios permanecieron largo tiempo en el predio de Los Pozos Bajos mientras que los otros dos, donde se concentra la mayor cantidad de observaciones del Instituto Chileno de Seguridad Ciudadana, eran acomodados con colchones y otros elementos por integrantes del grupo.

Valeriano3En el viaje de vuelta, la comitiva encabezada por el director regional subrogante Claudio Cortés sólo se detuvo un par de minutos en los sectores restantes, mientras periodistas de Canal 13 les pisaban los talones.

Una integrante del grupo de Olcese de nombre Carolina dijo a El Ciudadano que ellos tuvieron la oportunidad de leer un informe del servicio que no los perjudica en nada. Aseguró que la segunda visita es sólo la extensión de una primera fiscalización, motivada por las “calumnias” del Instituto.

“Tienen contactos por todos lados. Hasta con el Sename los deben tener”, aventura a decir Ana Fernández.

HIJOS DEL PODER

Entre las personas con nexos políticos de la comunidad es posible identificar a Augusto Larraín Sutil, hijo de Augusto Larraín Orrego, el primo del senador Andrés Zaldívar que operó al ex presidente Eduardo Frei Montalva.

También está Fernando Castillo Echeverría, hijo de Fernando Castillo Velasco, ex alcalde de La Reina de militancia DC y la escritora Mónica Echeverría, quien redactó la novela de facto “Cara y Sello de una Dinastía” sobre la izquierdista hermana de Agustín Edwards. Fernando hijo es hermano de Carmen Castillo, exiliada cineasta que convivió con Miguel Enríquez, torturada por Krassnoff . También trabajó con Luisa Durán, esposa del ex presidente Ricardo Lagos, antes de sumarse a Olcese.

Según Fernández, los integrantes de la ex secta de Pirque siempre tuvieron apoyo de afuera y nunca se pudieron conciliar las divisiones socioeconómicas de algunos de sus miembros. “(Paola) tiene el gobierno de la plata. Nadie puede usar plata supuestamente, pero los ABC1 se iban a sus lugares y contaban que habían comido esto, que se habían bañado con los mejores champús”, afirma.

-¿O sea que está segregado adentro?

-Claro, porque nunca se ha podido acercar estas instancias de la gente que está bien, que tiene plata, que ha sido rica toda la vida, con los que no lo hemos sido y que siempre hemos trabajado para tener nuestra vida, nuestra comida, nuestra ropa. El acercamiento que Paola tenía con esas personas era bastante.

-¿Con los Castillo Echeverría?

-Claro, Marcela Yentzen es la esposa de Castillo. Tienen dos hijos.

-¿Tiene contactos políticos?

-Claro que sí, ella (Marcela) ha sido diplomática en Canadá. Alguna vez se rumoreó que tuvo una onda sentimental con este caballero Insulza. Todos amigos entre ellos, de Lagos, de los políticos…

-¿Quién era amigo de Lagos?

-Yo sé que la familia de la mujer escritora es amiga de esta gente.

-¿El matrimonio de abuelos alguna vez concurrió a la comunidad?

-Sí los conocí. Los abuelos de los niños iban a Zárate. Me tocó estar ahí. Los que estaban en la comunidad siempre tuvieron apoyo de los que están afuera, de sus parientes. Por ejemplo, si Fernando iba a Santiago en bus, después llegaba en el auto que le había pasado el papá y la mamá y lo tenían ahí. Hay una niña que es sobrina de un ex alcalde…

-¿Antonia Alcaíno Izquierdo?

-Ella. La cuestión es que esa niña una vez trajo un auto y en un momento de locura se lo regaló a la Olcese. Los ricachones siempre tenían una posición, porque si uno iba a reclamar que una persona la estaba molestando, le decían ‘no, es tu mente, tú crees que es así pero es tu mal, es tu daño’, para que uno siga soportando.”

En su visita al poblado de Juntas de Valeriano, El Ciudadano intentó conversar con Paola Olcese, pero no pudo ser ubicada. Testigos dijeron que la líder de la comunidad acompañó a su pareja al Hospital de Vallenar, donde se internó por unos días para combatir una grave peritonitis.

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones