Era impensable en todos los sentidos. Cuando Dave Hickman tenía 14 años, él y su abuelo se fueron de caza. Después de escuchar un sonido extraño, Dave decidió investigar.
Fue entonces cuando descubrió un bebé abandonado en el bosque. Estaba empapada, con los labios azules, envuelta en nada más que una toalla. Eso fue en 1955, y durante 58 años, Dave no olvidó este momento impactante.
“Tengo la imagen en la cabeza de esa bebé tirada en el bosque, y yo parado frente a ella, cada día de mi vida. Y probablemente siempre la tendré…”, dijo.
A veces, las personas que nos afectan, sobretodo cuando somos muy jóvenes, y dejan una impresión duradera.
“El 22 de septiembre de 1955, yo fui a cazar con mi abuelo. De repente empecé a escuchar un sonido muy extraño. No era el sonido de un bebé llorando, era más como un suave arrullo. Pensé que tenía que averiguar lo que era, así que empecé a subir una cerca que estaba allí”, dijo a la cadena CBS.
Fue entonces cuando descubrió lo impensable: había una niña abandonada, casi congelándose.
“Cuando llegué a la parte superior, miré hacia abajo, y había un pequeño bebé. Ella estaba empapada. Sus labios estaban azules. Estaba envuelta en una toalla. Mi abuelo dijo: “Tenemos que hacer algo muy rápido, tenemos que conseguir ayuda para el bebé”, dijo.
Dave y su abuelo tomaron a la niña y la llevaron a las autoridades. Se le dio el nombre de Roseann Wayne.
La historia sobre el niño de 14 años de edad, quien salvó a la bebé congelada, incluso estuvo en las noticias en ese entonces. Pero para Dave, la historia no terminaría en la clausura de un periódico.
Unas semanas más tarde, Dave tenía el corazón destrozado por tener que decir adiós a Roseann cuando fue adoptada.
“Me dijeron ‘será adoptada la semana que viene’. Ella estaba profundamente dormida. Así que tenía que despedirme de ella”, dijo. Pero no tenía ni idea de adónde la llevaban.
David pasó los siguientes 58 años tratando de encontrar a la niña que salvó. Pero no fue hasta 2013 que el sheriff retirado John Catey lo llamó con la gran noticia.
“Me dijo: Dave escribe este nombre y este número de teléfono: Mary Ellen Suey’, le dije: quién es esa?.. Él respondió: es tu pequeña niña”.
David encontró a Mary Ellen Suey. Fue un momento muy conmovedor.
La familia adoptiva de la pequeña Roseann, le cambió el nombre por Mary Ellen.