“Mi origen es un pedazo de lo que soy. Es el ladrillo. Es lo que me dio una fuerza impulsora que equivale a 10.000 caballos de fuerza”. Esa es una de las frases que Sona Avedian posteó en su muro de facebook hace unas semanas. Y tal vez sea el concepto que mejor habla de ella.
Porque hace tres años, ahora tiene 33, decidió dejar su origen atrás y aprovechar esa energía que nombra, arrolladora e invencible, para concretar su sueño: ser una mujer.