El huracán mexicano Paulina Rubio ha puesto de patitas en la calle a su último novio, el cantante Gerardo Bazúa. No hace ni ocho meses que nació su pequeño hijo Eros, fruto de esta unión amorosa, y ahora la pobre Paulina se ha llevado uno de los desencantos más grandes de su vida…
Y es que a la cantante le toca enfrentar un nuevo bofetón amoroso: según publican E! y la revista TV1, la artista descubrió a través de los chats de WhatsApp de su novio algo que no le gustó nada…
Según informan estos medios de comunicación mexicanos, Paulina habría encontrado conversaciones con otras mujeres muy subidas de tono, e incluso fotografías con alto contenido sexual.
La cantante por lo visto ya habría perdonado otras infidelidades al padre de su hijo en el pasado:
“En sus tres años de relación, Rubio ya le había personado una infidelidad (…) Paulina le habría echado del domicilio que compartían y podían haber roto definitivamente su relación.”
Parece que ahora ha perdido la paciencia, pero ahora parece que esta gota ha colmado el vaso de su paciencia, rompiendo la relación de forma definitiva.
Por su parte, Bazúa intenta que la cantante lo perdone publicando frases de disculpa en su cuenta de Facebook, pero nos da que esta vez lo tiene complicado.
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Reveniu 
