
El bullying está matando a nuestros niños. Eso puede parecer una exageración, pero es real y tenemos que hacer algo con urgencia. No puede ser que más chicos se suiciden porque no soportan ir a la escuela cada día. Kirk Smalley está haciendo todo lo posible para generar consciencia sobre este tema. Su hijo de 11 años se disparó en su dormitorio; la herida que le producía el acoso escolar era demasiado profunda y no quiso seguir viviendo.
En este video, Kirk cuenta sobre el caso y sobre su experiencia personal. Él hizo una promesa 37 días después de la muerte de su hijo. Ahora está haciendo su máximo esfuerzo para detener el bullying en todo el mundo. Conoce más sobre él y su historia a continuación:
Él ya ha transmitido su mensaje a más de 700 mil estudiantes. Y no dejará de hacerlo
El proyecto consiste en generar consciencia y acabar con el acoso escolar de una vez por todas. Hay que evitar que los niños sigan suicidándose
Su pena es inmensa y es imposible no emocionarse con sus palabras
“Mi bebé se suicidó en nuestro dormitorio. Sólo pude decir: ‘está muerto’. Se disparó”.
-Kirk Smalley-
¿Qué piensas de esto? ¿Qué crees que puedes hacer tú?