Cuando tienes tu casa de ensueño, se te ocurren millones de ideas para que sea tal y como te lo esperas. Que tenga tu estilo, eso es lo más importante. Cuando Ericka Karner, decidió renovar la casa donde pasó toda su infancia, ocurrió algo inexplicable. Los constructores encontraron,enterrado, un ataúd de una pequeña niña. Y como nadie la pudo identificar, le pusieron “Miranda”. Esta es la extraña historia:
Erika decidió irse fuera de la ciudad mientras que renovaban su hogar. Y un día, recibió una llamada de uno de los hombres de la constructora contándole que había encontrado el ataúd de una niña, que estuvo aproximadamente 120 años ahí.

Pero, ¿cómo es que este ataúd llegó ahí? Resulta que la casa de Ericka fue construida después de que en 1930 el cementerio del lugar haya sido sacado. Se supone que el ataúd de esta niña fue dejado atrás, por accidente.

La dueña de la casa contó a un noticiero local que quiso enterrar a la niña, por respeto, pero desgraciadamente no se pudo ya que le pidieron un certificado de muerte.

Ahora, se sabe que están en los trámites legales, para que “Miranda” pueda ser enterrada.

Vía Upsocl