Con los alegatos de apertura del fiscal jefe de Bulnes, Álvaro Hermosilla Bustos, se dio inicio al juicio oral en contra de C.A.S.F, A.M.L.C y F.J.M.S (el tribunal prohibió dar sus nombres), los dos primeros padres de una niña de 12 años y el último cuñado de ésta, quienes están acusados de cometer violaciones reiteradas en contra de la víctima en la comuna de Bulnes (región de Ñuble).
El juicio está programado para 10 jornadas en el Tribunal Oral en lo Penal de Chillán y el fiscal está pidiendo penas de presidio perpetuo calificado en contra de los padres de la niña, y de presidio perpetuo simple para el cuñado de ésta.
Además, ambos progenitores están acusados de lesiones menos graves, en contexto de violencia intrafamiliar, contra su hija, delito por el que la Fiscalía les pide otros 540 días de presidio. A su vez, el padre enfrenta otra acusación por desacato, por la que arriesga sumar otros 5 años de presidio.
Según se expuso en la primera jornada de juicio, los hechos por lo que se les acusan a los tres imputados -quienes se han mantenido en prisión preventiva desde que fueron formalizados- ocurrieron en el domicilio familiar de Bulnes y en el hogar del cuñado, en la misma comuna, entre los años 2021 y 2023.
El fiscal Hermosilla explicó que “en el caso del padre, éste violaba a su hija de forma reiterada, mientras que la madre, previamente concertada con él, facilitaba la ocurrencia de este delito e, incluso, manipulaba a la víctima, negándole la ocurrencia de las agresiones sexuales”.
El cuñado, en tanto, aprovecho que la niña se encontraba bajo su cuidado, junto a su pareja y hermana de la víctima, para concretar las violaciones, entre los años 2022 y 2023.
La niña presentó un embarazo de 6 semanas, el que fue interrumpido bajo la Ley 21.030, a inicios de marzo de 2023, en atención a la causal de violación.
Lamentablemente, la víctima murió el 26 de julio de 2023 tras caer del quinto piso del Hospital Regional de Chillán, hasta donde había sido derivada, como medida de protección, por el Juzgado de Familia de Bulnes.
Por este último hecho en particular fueron formalizados en septiembre de este año (2025), por cuasidelito de homicidio, F.I.A.L., médico pediatra; C.B.J.F., enfermera; C.N.L.B., enfermera; J.L.Q.R., técnico en enfermería; y A.C.C., enfermera supervisora, todos funcionarios de salud del Hospital Regional de Chillán.
A ellos se suman, también en condición de imputadas, una psiquiatra y una técnico en enfermería, quienes no fueron formalizadas al no poder ser notificadas por el tribunal. Ambas cumplirían con el trámite el próximo 25 de noviembre.
La fiscal jefe (s) de Chillán, Nadia Espinoza, explicó que la niña fue cambiada de una habitación sin ventana a una con ventana, pese a que el personal médico antes mencionado estaba en conocimiento de que presentaba un alto riesgo de fuga. Por ello, para la persecutora, la caída y posterior muerte de la víctima es consecuencia directa «de infracciones y omisiones del equipo médico y de enfermería de la Unidad de Pediatría».
«Actuaron con negligencia, omitiendo medidas preventivas básicas cuyos cargos y reglamentos les imponían, a pesar de contar con información clínica clara y actualizada que advertía el alto riesgo de fuga de la paciente», declaró la fiscal Nadia Espinoza.
El Ciudadano