Abril 9-10 de 1948: La masacre de Deir Yassin

Deir Yassin es una aldea localizada a 3 km al oeste de Jerusalén, contaba con una población aproximada de 750 personas (1948), los cuales trabajaban la tierra, en ella cultivaban granos, vegetales, frutas y aceitunas, esta tierra propiedad de su población tenía un área de 2

Abril 9-10 de 1948: La masacre de Deir Yassin

Autor: Wari

Deir Yassin es una aldea localizada a 3 km al oeste de Jerusalén, contaba con una población aproximada de 750 personas (1948), los cuales trabajaban la tierra, en ella cultivaban granos, vegetales, frutas y aceitunas, esta tierra propiedad de su población tenía un área de 2.857.000 metros cuadrados. El poblado de Deir Yassin se caracterizaba por casas construidas con piedras, callejuelas estrechas que tenían algunas tiendas a los laterales; contaba con una mezquita y un pozo de agua. Todas estas construcciones estaban en un área de apróximadamente 1,2 km cuadrados.

En la noche del 9 amanecer del 10 de abril de 1948, miembros de las bandas paramilitares sionistas ( “Aragón Tsfai Leumi” dirigida en aquel entonces por Menahim Begin, un segundo grupo “Shteren” y un tercer grupo conocido como “Haganah”), atacaron sin piedad la población civil de Deir Yassin.

A las 2 am amanecer del día 10 de abril fue dada la orden de ataque, haciéndolo la banda “Aragón”, acompañados por los terroristas de “Haganah” y “Palmakh”, entraron por la zona este en dirección al sur, seguidos por el grupo “Shteren” con carros blindados y amplificadores. Al acercarse a la aldea llamaban a la población para que salieran de sus casas, indicándoles dirigirse hacia el oeste, rumbo al pueblo de “Ein Karem” prometiéndoles cuidar de su integridad y salvarles la vida; estos inocentes pobladores creyeron los llamados emitidos a través de los amplificadores, y empezaron a salir rumbo a la dirección indicada, ignoraban que iban hacer asesinados a sangre fría y de la manera más cruel e inmunda en manos de estos asesinos sionistas, que no perdonaron la vida a ninguno de los pobladores, irrumpieron en sus casas con ráfagas de metrallas, ponían granadas en las casas para que todo volara por los aires y no existiera la posibilidad de que quedara alguien con vida, y desaparecieran las casas, hasta la tarde del 10 de abril estos bárbaros no quedaron satisfechos de su matanza, una vez todo destrozado y asesinada la población, ocuparon la aldea.

En la tarde de este maldito día llegó una unidad del “Haganah” bajo el mando de “Yenshorin Sheif” con la misión de cavar una fosa común para enterrar a los más de 350 cádaveres de mujeres, jóvenes, niños y ancianos asesinados; (Yenshorin Sheif) recordando aquel día sangriento y criminal, comenta “…aquel día primaveral era maravilloso, los árboles de almendra estaban llenos de flores, pero por todos los lados venía el olor desagadable de los cadáveres que enterrábamos en la fosa común, y se veía el destrozo del pueblo”.

Testimonio de esta masacre y testigo presencial del enterramiento de decenas de cadáveres de árabes palestinos asesinados lo fue el jefe de la misión de la Cruz Roja Internacional en Palestina (en 1948), el señor Jack de Renie quien redactó un informe y lo publicó en francés, relató las dificultades y obstáculos causadas por “Haganah” y la “Agencia Judía”, que le impedían a él y a la Cruz Roja de cumplir con sus tareas al querer evacuar los cadáveres y a dos mujeres sobrevivientes, una de ellas mayor de edad que se escondía detrás de unos leños; en la aldea fueron masacradas más de 400 personas, sólo pudieron huir cerca de 40; estás bandas sionistas, sigue diciendo Jack de Renie en su informe, “rechazaron ayudarme y protegerme, vestían uniformes verdeolivo y usaban cascos, todos sus miembros eran jóvenes y adolescentes, varones y hembras, estaban armados con metralletas, rifles, granadas, tanto sus armas como sus uniformes estaban llenos de sangre, este era el grupo encargado de asesinar a los sobrevivientes”.

La importancia politico-militar de esta masacre para los sionistas radica en que al divulgarse la noticia y saberse de esta barbarie, cundiera el pánico entre la población de los pueblos cercanos a Jerusalem, y todos dejaran sus casas y sus tierras, y se fueran para salvar la vida de sus niños, mujeres y ancianos, como así sucedió, dejando libre, el paso a los sionistas, como afirmó Menahem Begin “…lo que ocurrió en Deir Yassin y su divulgación ayudó a triunfar en batallas decisivas y nos allanó el camino en el futuro”.

Por Dr. Esam Azmi El- Khawaya

Publicado en: judiosantisionistasargentina.blogspot.com

 


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano